Inauguración del barco 'Juan de Homar' navegando por el Canal de Castilla entre Frómista y Boadilla del Camino en Palencia

Inauguración del barco 'Juan de Homar' navegando por el Canal de Castilla entre Frómista y Boadilla del Camino en Palencia Brágimo / ICAL

Palencia

Navegando por Palencia, con P

A lo largo de los 207 kilómetros del Canal de Castilla se puede conocer la historia que esconde la provincia palentina en las dulces aguas de sus tres ramales

1 octubre, 2022 07:00

Noticias relacionadas

El Canal de Castilla nace en el río Pisuerga desde las montañas palentinas y recorre su trazado hasta Palencia, donde se bifurca en dos rutas que desembocan en Valladolid, una de ellas en Medina de Rioseco y otra en la capital vallisoletana. A lo largo del recorrido de esa magnífica obra de la ingeniería civil de los siglos XVIII y XIX se pueden apreciar no solo las históricas esclusas y dársenas, sino también puentes, acueductos y centros de interpretación.

Este canal, Bien de Interés Cultural desde junio de 1991, recorre con sus aguas 207 kilómetros a lo largo de todo su trazado. En sus inicios, su función era transporte de mercancías y pasajeros, de ahí las dársenas, una especie de puertos fluviales en las que el comercio del cereal afloraba con más ímpetu en la meseta. En la actualidad, es un canal de interés turístico por su navegabilidad, así como las rutas paralelas destinadas a senderistas y ciclistas. Además de esto, también es de gran utilidad para el regadío y el abastecimiento de agua por las zonas en las que discurre, para beneficio de 400.000 personas, indica Palencia Turismo.

La construcción del ambicioso proyecto del Canal de Castilla comienza en 1753 con el proyecto de Antonio de Ulloa y que, tras el parón por la Guerra de la Independencia, se finalizaron sus obras en 1849. Se tardaron esos casi 100 años en edificar el actual recorrido del Canal de Castilla, que se divide en tres diferentes ramales.

El primero de estos es el Ramal Norte. A lo largo de sus 75 kilómetros toma las aguas del río Pisuerga desde Alar del Rey hasta Ribas de Campos. Tiene grandes desniveles por lo que para salvarlos fueron necesarias hasta 24 esclusas.

A continuación, la bifurcación situada al suroeste de Palencia divide el Canal en los dos ramales que desembocan en la provincia vallisoletana. El primero, y más extenso, es el Ramal de Campos, que recoge las aguas y las guía a través de 78 kilómetros hasta Medina de Rioseco. Es el más llano en su orografía, por lo que solo necesitó de 7 esclusas.

Seguidamente está el Ramal Sur, que recorre desde la capital palentina hasta la capital vallisoletana. Con 54 kilómetros de itinerario, se puso en parcha todo un mecanismo de "ingeniería del transporte" con la construcción de 49 esclusas con las que salvar los 150 metros de desnivel. Estas quizás son las de mayor interés debido a la alternancia entre esclusas ovaladas y rectangulares.

Navegando por el Canal de Castilla

En la actualidad, este canal es navegable e ideal para conocer monumentos de la ingeniería que componen este recorrido y disfrutar en el turismo palentino de una forma diferente.

A través de las dulces aguas del Ramal de Campos se puede navegar en la embarcación 'Antonio de Ulloa', que zarpa de la Dársena del Canal de Medina de Rioseco, además de ser la dársena más amplia de todo el canal, con unas dimensiones de 332 metros de longitud y 52 metros de ancho. También en el recorrido de esta ruta se encuentra el Museo del Canal de Castilla, que ofrece un viaje a través de la historia del canal con objetos clave para entender esta magnífica obra. Desde ahí, a la altura de la localidad de Villaumbrales, se pueden alquilar embarcaciones recreativas para los más aventureros.

El Ramal Norte es uno de los que tienen mayores elementos de interés respeto al resto, debido a las virguerías necesarias para salvar los desniveles del descenso desde la montaña palentina.

En este recorrido se puede apreciar el comienzo del Canal de Castilla desde la Presa del Rey, donde se recoge del Pisuerga el agua que da vida a la totalidad del canal. Además, desde allí se puede visitar el Centro de Interpretación del Canal de Castilla, y para los más audaces, se encuentra un embarcadero desde el que tomar el 'Marqués de la Ensenada', un barco turístico a través del canal, llegando a atravesar una de las esclusas.

Poco más adelante, se encuentra en la localidad burgalesa de Melgar de Fernamental la embarcación turística 'San Carlos de Abánades', con viajes regulares de martes a domingo durante todo el año.

Y en Frómista se encuentra la nueva ubicación del barco 'Juan de Homar', que permite realizar recorridos de 6,5 o de 3,5 kilómetros a lo largo del canal, en paralelo con el Camino de Santiago. También está disponible una embarcación que permite que suba a bordo hasta dos perros por viaje.

El Canal de Castilla es uno de los destinos turísticos más desconocidos y exóticos de la provincia de Palencia, que permite un viaje en barco en el que retrotraerse al siglo de la ilustración española en el corazón de la meseta castellana.