Clarisas de Belorado en el obrador del convento

Clarisas de Belorado en el obrador del convento

Burgos

Las monjas clarisas de Belorado sitúan el inicio de su lucha: en 2020 y con el Covid-19

Este sábado han emitido un comunicado en el que hablan sobre la postura de la iglesia durante la pandemia

25 mayo, 2024 16:03

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Las monjas clarisas del Monasterio de Santa Clara de Belorado siguen de actualidad. Este sábado, a través de un comunicado difundido a través de sus redes sociales, han situado el inicio de su lucha con la iglesia en el año 2020, con motivo de la pandemia del Covid-19 y tras hablar de ciertas decisiones tomadas desde el seno de la iglesia. 

Las hermanas se han mostrado “dispuestas a compartir” su camino con todo el que quiera conocerlo para “profundizar” en algún punto de los que se citan en la carta que acompaña a su manifiesto católico, de 70 páginas.

Apuntan que el año 2020 “supuso un momento de preguntas, choques y contradicciones” cuando, en el mes de marzo, se decretaron “medidas excepcionales en todo el mundo guiadas por los organismos internacionales”.

Medidas extremas, pero que en el caso de España nunca llegaron a prohibir la asistencia a los sacramentos. No obstante, ante los supuestos graves peligros para la salud, surgió de la Conferencia Episcopal la prohibición de asistir a los templos y la de asistir a los enfermos en sus domicilios”, apuntan.

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Añaden que fue “verdaderamente doloroso escuchar a los supuestos pastores explicar que los sacramentos no eran necesarios” y que “cuando pasase el peligro ya se podría hacer”.

“Ante nuestros ojos, la iglesia dejaba de hacer lo que siempre había hecho: abandonaba el cuidado de la vida eterna, por el supuesto cuidado de la vida temporal”, añaden en su escrito y añaden que el propio Bergoglio “nos mostró cómo la imagen que en anteriores pandemias había sido sacada en procesión, quedaba inmóvil en el Vaticano”.

Ante estos hechos, y “cambio de rumbo, las hermanas no podíamos más que preguntarnos qué estaba pasando tanto dentro como fuera de la iglesia, y sobre todo fuera de ella”, añaden.

“Preguntas, investigación, estudio, oración… Poco a poco, algunas de esas preguntas fueron obteniendo respuestas… “, finalizan.