El clima político de Castilla y León, que parece no tener un momento de respiro desde que hace seis meses se conformara el Gobierno entre el Partido Popular y Vox, ha vuelto a encenderse a cuenta de los presupuestos autonómicos para 2023, presentados la pasada semana por el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, y el vicepresidente, Juan García-Gallardo.

Las nuevas cuentas públicas han sido blanco de las más fervientes críticas por parte de la oposición –PSOE, Unidas Podemos y Ciudadanos ya han anunciado que presentarán enmiendas a la totalidad a las mismas– y han mostrado de nuevo una tónica habitual desde que se conformó el Ejecutivo de coalición: la capacidad de Vox de imponer gran parte de sus postulados a pesar de ser el socio minoritario del Gobierno, con solo 13 procuradores, frente a los 31 del PP.

Las cuestiones más polémicas, relacionadas con lo que se conoce como "la batalla cultural" –la lucha entre los grupos políticos por lograr el dominio de sus creencias y valores– llevan el sello de Vox, que ha logrado que su mensaje se plasme en las nuevas cuentas en aspectos como la lucha contra la violencia intrafamiliar, la defensa de la tauromaquia o la apuesta por la energía nuclear, entre otras cuestiones.

De la violencia de género a la intrafamiliar

El primer ámbito en el que Vox ha logrado imponerse ha sido en el referente a la violencia intrafamiliar, la que se produce en el ámbito de la familia. Antes de que la formación dirigida por García-Gallardo entrase en el Ejecutivo, el Gobierno de PP y Ciudadanos había fuesto el poco únicamente en la lucha contra la violencia de género, un concepto que Vox niega –ya que afirma que "la violencia no tiene género"– ya que apuesta por combatir "todas las violencias" por igual.

El partido ha logrado que se incluya una partida de 500.000 euros en las nuevas cuentas dirigida a luchar específicamente contra la violencia en el ámbito familiar, independientemente del sexo de los implicados, que, según García-Gallardo, coloca a Castilla y León "a la cabeza" en la lucha contra ese tipo de violencia.

El vicepresidente de Acción Política de Vox, Jorge Buxadé, se pronunció el pasado lunes con respecto a esta cuestión y aseguró que el objetivo de esta partida contra la violencia de género es eliminar "el adoctrinamiento" y acabar con "el concepto de violencia de género", en unas palabras que levantaron polvareda y llevaron a reacciones de la oposición.

El líder socialista, Luis Tudanca, que ha insistido en varias ocasiones en que estos presupuestos son "la rendición" del presidente de la Junta ante Vox, aseguraba, tras las palabras de Buxadé, que quedaba claro "quien manda" en la Comunidad. Una partida para luchar contra la violencia intrafamiliar que es la primera vez que forma parte de unos presupuestos en Castilla y León.

En estos momentos, además, se encuentra en tramitación una nueva Ley de Violencia Intrafamiliar destinada a "prevenir y combatir" este tipo de violencia, que servirá de sostén legislativo para las partidas anunciadas en los presupuestos de 2023.

La defensa de la tauromaquia

Vox ha logrado imponer sus postulados también en lo referente a una tradición española que la formación aboga por proteger y defender como parte de la identidad del país: la tauromaquia. Un aspecto para el que el partido cuenta con un auténtico 'guerrero' dentro del Gobierno ya que el consejero de Cultura, Turismo y Deporte, Gonzalo Santonja, de Vox, es un ferviente defensor y estudioso de esta tradición.

Desde que se convirtió en el titular del departamento, Santonja ha impulsado diferentes iniciativas relativas a la tauromaquia y ha sido especialmente activo en la defensa de la revalorización de esta tradición. En el mes de junio, el consejero anunció la convocatoria de un programa de becas de investigación sobre la tauromaquia y a principios de este mes la Consejería de Cultura anunció que se dotaría de 18.000 euros al Premio de Tauromaquia de Castilla y León, que hasta ahora no contaba con una prima económica.

Los presupuestos autonómicos han incidido en esta materia con importantes partidas referidas a la tauromaquia, en otro aspecto en el que Vox ha logrado hacer penetrar su mensaje político. En concreto, se ha planteado un programa de promoción de la tauromaquia, dotado de 350.000 euros, dentro de la Fundación Siglo, que pertenece al departamento de Santonja. Por otro lado, se han programado casi 300.000 euros en transferencias de capital para la promoción de esta tradición tan defendida por Vox.

La apuesta por la energía nuclear

El proyecto de ley de presupuestos autonómicos contempla partidas también por otra cuestión que ha sido caballo de batalla de Vox desde que entró en el Gobierno de coalición, y especialmente en los últimos meses: la apuesta por la energía nuclear para combatir la crisis energética.

El tan defendido estudio sobre la viabilidad de reabrir o crear centrales nucleares en la Comunidad tiene su reflejo en las cuentas públicas con un estudio sobre el Plan de Promoción de la Industria Nuclear, que cuenta con una asignación de 200.000 euros. Los dos años siguientes, 2024 y 2025, la cuantía prevista para este plan será de 160.000 euros cada año.

Este miércoles, el propio García-Gallardo defendía desde Zamora esta apuesta por la energía nuclear plasmada en los presupuestos, y aseguraba que era necesaria para lograr la "soberanía energética" y para abaratar la factura de la luz.

En concreto, el vicepresidente de la Junta detalló que ese plan se basaría en la apertura de centrales con reactores SMR en ubicaciones que ya hubiesen contado con centrales de producción de energía. Otro aspecto más en el que Vox ha hecho valer sus 13 procuradores, impregnando con su 'Agenda España' los presupuestos de Castilla y León para el año 2023.