La Junta de Castilla y León achacó hoy a la reforma laboral emprendida por el Gobierno de España el “alarmante” descenso interanual en la contratación, cifrado en 11.753 contratos menos firmados en la Comunidad con respecto a julio de 2021 (-13,10 por ciento) y 182.735 en el país (-9,94 por ciento).

El viceconsejero de Dinamización Industrial y Laboral de la Junta, Óscar Villanueva, apuntó así que aunque los contratos laborales registrados en Castilla y León en julio ascienden a 77.935, con una subida de casi el dos por ciento intermensual debido a los casi 1.500 contratos nuevos frente a la bajada en la contratación en España del 6,41 por ciento, el descenso general en la contratación interanual es “alarmante” al estar “muy por debajo del mismo mes de 2021, cuando no existía la reforma laboral”.

No obstante, Villanueva destacó que Castilla y León, por quinto mes consecutivo, cuenta con un descenso en el número de parados de más de 13.000 personas. Una mejora del 2,09 por ciento que sitúa en 117.449 a los castellanos y leoneses registrados en el paro y que supone un dato positivo “a pesar de la ralentización del mercado laboral, que podría adelantar un cambio de tendencia”, como apunta el empeoramiento del paro intermensual a nivel nacional, con un empeoramiento del 0,11 por ciento frente a la mejora del 0,18 por ciento en Castilla y León.

Son así, según Villanueva, “15 meses consecutivos de descenso del paro registrado”, teniendo en cuenta los datos de la comparativa interanual que son “los que verdaderamente marcan la evolución del mercado laboral”. Y es que Castilla y León ha conseguido un descenso de casi 31.000 parados, lo que supone una mejora del 20,68 por ciento, “cinco puntos más que la media española”, tras “el mejor mes de julio de toda la serie histórica”.

“Todas las provincias y todos los sectores cierran julio de este año con menos parados que en el mismo mes del ejercicio anterior”, afirmó el viceconsejero de Dinamización Industrial y Laboral, que cifró en un 10,19 por ciento la tasa de paro en Castilla y León frente al 12,48 por ciento nacional, incluyendo a dos de las provincias de la Comunidad, Soria y Segovia, entre los tres territorios de España con menor tasa de paro.

De hecho, a nivel provincial Villanueva recordó que el paro también baja intermensualmente en siete de las nueve provincias, y afirmó que el “peor comportamiento” de Valladolid, con una subida del paro del 2,38 por ciento, se debe a que es un territorio “donde se están aplicando con mayor intensidad las políticas socialistas de la Agenda 2030, que paralizan la inversión y la creación de empleo”.

83 millones para fomentar la empleabilidad

Presumió asimismo Villanueva de que Castilla y León es la séptima comunidad en variación relativa intermensual y la cuarta en análisis interanual, por lo que “las acciones promovidas desde la Consejería de Industria, Comercio y Empleo están dando sus frutos” gracias a los programas de formación y contratación que, hasta la fecha, han supuesto una inversión de 57 millones de euros para que se beneficiaran 40.000 castellanos y leoneses, con “líneas de empleo local destinadas a ayuntamientos y diputaciones y líneas mixtas para fomentar el empleo en distintas empresas de la región”.

No obstante, Villanueva aseguró que no se quedarán ahí ya que la Consejería “quiere redoblar su esfuerzo en materia de empleo para ajustar las líneas de ayuda a los que más lo necesiten, incluidas todas las víctimas de violencia intrafamiliar”. En ese sentido, anunció para agosto, “con el fin de continuar con la tendencia creciente de los últimos meses” en creación de empleo, una inversión de más de 83 millones de euros para fomentar la empleabilidad y beneficiar a 56.000 ciudadanos de la Comunidad.

Por último, en relación a las 1.194 personas que siguen en situación de ERTE, Villanueva recordó que la Consejería “tiene una línea de complemento salarial con requisitos muy accesibles para ayudar a las economías domésticas de estos trabajadores”, y apuntó a acciones como la Tarifa Plana Plus o la línea Espíritu Emprendedor para “fomentar y consolidar el trabajo por cuenta propia” tras un descenso de 63 autónomos en la Comunidad en julio.