Los ganaderos han tenido que adaptarse a las circunstancias provocadas por la pandemia empleando nuevos métodos de venta. Una nueva y complicada situación que se ejemplifica especialmente en la provincia de Zamora. Por ello, el televisivo veterinario, Frank Cuesta dedica su nueva temporada de 'Wild Frank' a analizar esta "nueva realidad animal" tras el paso del Covid en nuestro país, en los últimos episodios del programa, que se emitirá este el domingo a las 21:30 solo en DMAX.

En este caso, el extenista leonés se comunica con Alberto, un ganadero de Sanabria, dedicado a la crianza del apreciado cordero lechal, para que le narre su difícil situación económica y de espacio actual, y cuáles han sido las medidas que ha tenido que tomar desde que estallara la pandemia del coronavirus, para poder sobrevivir con su explotación ganadera. 

Este ganadero sanabrés narra ante las cámaras que al comienzo de la crisis sanitaria su negocio manejaba "unos 300 y pico corderos, los cuales tenía unos 20 días para sacar". Pero con el parón casi total de la actividad hostelera, Alberto estuvo "acojonado" por no tener la posibilidad de que el carnicero comprará su género, por lo que llegó a un trato con él: guardar los lechazos congelados en la cámara a cambio de un precio y que el propio ganadero se lo vendiera a los restaurantes. Así, el ganadero sababrés iniciaba una nueva forma de negocio de supervivencia, "donde yo me quito los intermediarios, gano un poco más y el restaurante también", explica a Frank Cuesta.

Las cámaras de DMAX acompañan a Alberto al restaurante La Chopera, en El Puente de Sanabria, para charlar igualmente con el chef del restaurante, que relata cómo aceptó esta nueva forma de adquirir género, directamente del ganadero "como una forma de apoyo a este, porque lo estaban pasando realmente mal". Un apoyo mutuo entre vecinos de la comarca, que queda plasmado en el programa del naturalista leonés y que podrá disfrutarse este domingo en DMAX.