Grupo Intersur, una de las mayores empresas productoras y comercializadoras de patata de Europa, ha inaugurado esta mañana en Tordesillas su primera fábrica de producción de patata nueva en la que ya es su segunda sede nacional, junto al centro operativo de Sevilla.

Ángel Muñoz, director general de Intersur, ha avanzado que el dimensionamiento de la empresa y la elección estratégica de su nuevo centro de producción en Tordesillas, pasa por "abrir el negocio a mercados internacionales, sobre todo a Centroeuropa", con un volumen de recogida que esperan alcance las 25.000 toneladas de patata en los próximos años. "Competir es posible, pero hay que hacerlo mejor y producir mejor para ser más competitivos y abrir nuevos mercados", ha asegurado. 

Con una inversión que rondará los tres millones de euros hasta 2025, Intersur prevé crear 12 empleos y 20.000 jornales en cada campaña, a través de su nueva planta, con capacidad para almacenar hasta 3.000 toneladas de patata, que esperan llegue a las 10.000 en los próximos años a través de "nuevas inversiones".

La empresa, que cerró el pasado año con una facturación agregada de 32 millones de euros, espera alcanzar los 38 millones al cierre del presente ejercicio.

Enrique Gómez, delegado de Intersur en Castilla y León, ha sido claro respecto a los planes que la Compañía tiene para esta nueva planta ubicada en Tordesillas: "Queremos que Castilla y León se convierta en la punta de lanza de Intersur para el Grupo".

Tordesillas ha sido el lugar escogido por esta empresa agrícola por su excelente ubicación y comunicación tanto con el cuadrante noroeste como con Madrid. Un nuevo centro de producción que espera recoger ya, en la presente campaña, 8.000 toneladas de patata.

Al acto de inauguración han acudido, entre otros, el viceconsejero de Política Agraria Comunitaria y Desarrollo Rural de la Junta de Castilla y León, D. Juan Pedro Medina Rebollo, y el alcalde de la localidad, Miguel Ángel Oliveira.  

Medina Rebollo ha aprovechado su presencia en la inauguración para recordar que "Castilla y León tiene un modelo profesional de patata con muchas explotaciones de más de 20 hectáreas", y ha incidido, en plena sequía, en la necesidad de abordar este problema "no sólo desde la perspectiva de cómo gestionar este recurso sino, además, de cómo disponer de más agua".

Además, ha anunciado que la Junta de Castilla y León "va a iniciar actuaciones para abaratar el coste de la energía con la comunidad de regantes" dada la actual situación hídrica y los elevados precios de este insumo.

Además, y con una interprofesional de la patata creada hace ya más de dos años en la Comunidad, Rebollo ha apostado por crear una marca de garantía de la patata de Castilla y León para potenciar una industria que supone el 40% del total nacional.