"¡Qué momentazo vais a vivir esta noche!", ha dicho Ana María Aldón nada más empezar la gala de Supervivientes 2020 de este jueves. "No veo el momento, lo estoy deseando", ha contestado Jorge Javier Vázquez.

Y es que, en el último juego de las tentaciones, en el que los participantes han tenido que elegir entre varias pruebas, tras muchos días pasando hambre, la mujer de Ortega Cano accedió a raparse el pelo a cambio de tres deliciosos cocidos.

"Mi marido se ha cortado el pelo cortito cortito, mi niño igual, así que yo también. Soy una mujer de palabra", ha asegurado la superviviente. "Yo sé que habéis aprovechado mi ausencia para raparos la cabeza, lo habéis hecho porque queríais, pero yo porque necesito comida y energía para ir a pescar", ha añadido.

Ha sido en la Palapa cuando Aldón se ha cambiado de look en directo. El azar quiso que tuviera que meter maquinilla a 15 milímetros y así lo ha hecho, dejándose en manos de Rocío Flores y Albert Barranco.

Nerviosa pero valiente, la diseñadora ha demostrado que está dispuesta a todo por continuar en el concurso. Primero Jorge ha sido quien le ha cortado la coleta, después Ivana, Hugo, Yiya… Hasta que Flores y Barranco se han deshecho del resto de la melena.

"Gloria, cuando llegue a España, recíbeme en plató con cinco pelucas, todas distintas. Elígelas a tu gusto", ha dicho la diseñadora riéndose por no llorar.