Había pocas dudas sobre la fecha de estreno de Supervivientes y Telecinco confirmó anoche lo que era un secreto a voces: la nueva edición del reality de superviviencia se estrenará el próximo jueves 20 de febrero cubriendo así el hueco que deja libre La isla de las tentaciones.

Como recordaran, el programa presentado por Jorge Javier Vázquez tuvo que ser adelantado más de dos meses -el año pasado se estrenó el 25 de abril- debido a la cancelación de GH DÚO por el caso Carlota y la necesidad de Mediaset España de cubrir su hueco en la parrilla.

Asimismo, desde el grupo de comunicación se ha explicado que se ha decidido "adelantar unas semanas el estreno de Supervivientes para encajarlo por programación entre la Copa del Rey y la Eurocopa", que llegará en junio.

En este sentido hay que recordar que ya en 2018, Mediaset se vio obligada a adelantar la emisión de Supervivientes y readaptar su programación debido al Mundial de Rusia. Aquella edición tuvo una gala menos que la edición de 2017 pero las mismas que en 2016.

Hace cuatro años, asimismo, Telecinco también adelantó la final de Supervivientes a mediados de junio, cuando en realidad tenía que terminar un mes después, debido a que la Eurocopa arrancaba el 10 de junio.

Un casting ¿low cost?

De momento, los concursantes confirmados son  Albert Barranco, Rocío Flores, Bea Retamal, Ivana Icardi, Nyno Vargas, Vicky Larraz, José Antonio Avilés, Hugo Sierra, Alejandro Reyes, Jorge Pérez, Jaime Ferre y Elena Rodríguez.

Un casting que ya ha sido tildado por muchos como ‘low cost’, pero que no deja de ser una gran oportunidad para el programa, teniendo en cuenta lo bien que han funcionado este tipo de perfiles en otras ediciones -José Luis Losa, Jorge Díaz, Christopher Mateo- y el reciente éxito de La isla de las tentaciones.

De hecho, hasta el triunfo del reality presentado por Mónica Naranjo, desde Mediaset España se defendía que los realities de anónimos estaban agotados. Algo que, como hemos visto, ha quedado descartado con el formato de Cuarzo. 

Pero, es más, cualquier seguidor de reality sabe que los anónimos siempre están dispuestos a arriesgar más que los famosos en este tipo de formatos ya que no ven peligrar su prestigio o fama y no tienen nada que perder.