Fue en noviembre de 2009, apenas seis meses después de que naciera Sálvame, cuando Paz Padilla se puso por primera vez al frente del programa de Telecinco. Lo hacía en la noche de los viernes, para que Jorge Javier Vázquez pudiese hacer frente a la edición nocturna y Deluxe. Desde entonces, siempre se ha hablado de la presentadora como sustituta cuando, realmente, ella es la que representa el verdadero espíritu de Sálvame.

Desde que se conociera que Padilla se podría al frente de Sálvame fueron muchos los que se preguntaron si aguantaría estar en este programa de televisión. Y es que Paz llevaba muchos años en televisión en programas de entretenimiento más familiares. Nunca había tenido que hacer frente a un programa con tantos enfrentamientos en directo.

Ahora que se cumplen ocho años de su primera aparición, Paz Padilla sigue en el programa de Telecinco y es la verdadera cara de Sálvame, la que nunca ha fallado al programa y la que ha estado en el formato en las buenas y en las malas. No ha sido hasta este verano cuando Paz ha podido apartarse un poco del programa y tener sus propias vacaciones. Y es que la presentadora siempre ha sido tratada como alguien de segunda cuando su papel en Telecinco es muy importante.

Paz Padilla sigue representando ese espíritu canalla, irónico, chistoso y alegre que era Sálvame cuando nació

Ahora se habla de que Sálvame está pasando por un mal momento. La crisis catalana ha trastocado las audiencias y el programa vespertino de Telecinco se ha resentido en estas últimas semanas. Ellos mismos han aceptado que ya no se ríen tanto como antes. Que han perdido la sonrisa. Sin embargo, Paz Padilla sigue representando ese espíritu canalla, irónico, chistoso y alegre que era Sálvame cuando nació. Aquel Sálvame golfo.

Esta semana, Paz Padilla pasaba por uno de sus peores momentos en televisión. Un enfrentamiento con Mila Ximénez hizo que la presentadora abandonara su puesto de trabajo unos minutos. Explotó en medio de su propio programa de televisión. Un ataque hacia una presentadora de Telecinco que Jorge Javier Vázquez no hubiese permitido. Y es que Paz Padilla está considerada por muchos como una presentadora de segunda. Sin embargo, ha mantenido el barco flotando mientras Jorge Javier no estaba, demostrando que ella también es capaz de mucho.

Su gran atractivo para los espectadores quedó demostrado cuando se sentó en Mi casa es la tuya. Su aparición en el programa de Bertín Osborne gustó mucho. Su entrevista ha sido la más vista de la temporada, con un 18,5% de cuota de pantalla y más de 2,6 millones de espectadores. Paz Padilla demostró en ese momento que es una presentadora de primera fila en Telecinco. Una presentadora con historia.

La propia cadena le ha confiado durante años las galas de Navidad junto a Joaquín Prat. Y el resultado de audiencia de dichas galas ha sido bastante bueno. De nuevo, Padilla volvía a demostrar ser una cara de la cadena. Y por eso debe ser defendida y tratada como tal. De la misma manera que a Jorge Javier Vázquez se le respeta en sus platós, Paz Padilla merece ser reconocida como una de las grandes presentadoras de la cadena. Tal vez reconociendo la fortaleza de este gran personaje comenzarían a mejorar las cosas para Sálvame.