Según datos del Instituto Nacional de Estadística, de los 46.439.864 habitantes residentes en España, 4.447.852 son extranjeros. Es decir, un 9,6% de la población. Una realidad que no suele ser retratada en nuestra ficción.

Una injusta representación de la inmigración que poco a poco se va corrigiendo con series como El Príncipe, Refugiados o ahora con Mar de plástico, el nuevo thriller policíaco de Antena 3 que se estrena esta noche en multicanal (Antena 3, Neox, Nova y Mega) a partir de las 22:30 horas.

En Mar de plástico sale a relucir la duración situación que viven los inmigrantes en estas zonas

En la ficción protagonizada por Rodolfo Sancho, la inmigración se convierte en un personaje más. Y es que la serie, rodada en zonas de Almería como El Ejido o Níjar, tiene como telón de fondo los problemas laborales y sociales de los inmigrantes.

De hecho ya en el primer episodio sale a relucir la dura situación que viven los inmigrantes en estas zonas, tanto en cuestiones laborales (explotación) como de integración (el racismo por parte de determinados grupos).

Una realidad que ha llevado a algunas asociaciones de la zona como Acción por Almería a criticar la “imagen parcial y difamatoria” de esta serie. No obstante, los responsables de la serie defienden que la ficción muestra “lo que sucede aquí”, la vida misma.

Y así fue percibido por los periodistas que pudieron ver el primer episodio en el pasado FesTVal de Vitoria. Y es que aunque en los últimos años haya mejorado la integración, miles de sin papeles en paro malviven en chabolas.

Marcando tendencias

Otra de las ficciones actuales que mejor retrata la inmigración en nuestro país es El Príncipe, en la que se retrata una de las barriadas más peligrosas de España. Un submundo donde bulle el extremismo yihadista entre los jóvenes sin trabajo.

En ese caso también ha habido críticas a la imagen que se ha dado. “En los últimos capítulos, todos los protagonistas musulmanes o de origen magrebí mostraban su verdadera identidad como fanáticos terroristas (...) ¿Por qué se criminaliza a la mayoría de personajes musulmanes o de origen magrebí?”, criticaba el periodista Xavier Rius.

En el lado opuesto está la influencia que el personaje de Fátima (Hiba Abouk) ha tenido en la forma de vestir de las jóvenes musulmanas de Ceuta. “He marcado tendencia en la manera de poner el velo. Como ella es más libre, más díscola, se tomó la decisión de que le viera un poco el pelo”.

En lo que respecta a Refugiados, el thriller dramático de Bambú Producciones de premisa futurista -3.000 millones de personas del futuro viajan al presente huyendo de un inminente desastre global- que trataba la superpoblación, la inmigración o el racismo.