Frank Cuesta visitó este martes El Hormiguero para charlar con Pablo Motos sobre las dos graves experiencias cercanas a la muerte que ha vivido en lo que va de año. "¿Quieres dejar de intentar morirte, por favor? Cuando no te intenta matar un ciervo, te intenta matar una rana", le espetó el presentador.

De esta forma, el que fuera presentador de Wild Frank relató su reciente envenenamiento con una rana. "Son ranas que, en cautividad, al darle una comida específica, son venenosas", contó. "Mi falta de conciencia hizo que cogiera un montón de ranas para sacarlas, y a la media hora me empecé a sentir mal, peor, y dije 'o voy al hospital o me muero", continuó Cuesta, que, en ese momento, notó como los riñones se le iban "parando, la sangre envenenando y se te va la vida". 

"¿Crees que en una de estas caerás?", le preguntó Motos. "Espero que sí. Dentro de muchos años, pero no me jodas, que no sea que Frank iba en bicicleta y se dio en la cabeza", respondió Cuesta, que contó cómo le gustaría que fuera su muerte: "Te tienes que morir de manera épica. Que se pueda grabar y mis hijos vendan el vídeo".

Pablo Motos recordó también cuando el naturalista llegó a estar en coma. "Me desperté cuatro días más tarde en un hospital, fue un mareo y me caí", relató Cuesta.

Durante su visita, el presentador de Wild Frank fue sorprendido por el youtuber Plex, quien entró en el plató con una máscara de ciervo, en un guiño a otro de los ataques que había recibido el naturalista en los últimos meses. Cuesta fue atacado, entonces, por el animal, que le provocó varias lesiones graves, hasta dejarle "a punto de morir", según sus propias palabras.

Su opinión sobre el caso Daniel Sancho

El presentador de El Hormiguero quiso saber la opinión de Cuesta sobre el juicio a Daniel Sancho que comenzó este martes en Tailandia, un país que conoce muy bien, ya que tiene instalada su residencia allí y es donde juzgaron a su exmujer, Yuyee Alissa Intusmith, por tenencia de drogas.

"Yo, desde el principio, dije que no hay que ponerse en contra de los tailandeses, no les insultes y no digas que han hecho las cosas mal. Cuando llegues al juicio, es un juicio, pero antes, todo lo que digas o hagas, ellos lo van a saber y eso siempre va a repercutir, sobre todo, en la persona que está siendo condenada, pero no en la pena, en lo que le va a pasar dentro", comenzó diciendo el youtuber.

[Ana Rosa Quintana habla alto y claro sobre el doble juego de Rodolfo Sancho durante el juicio a su hijo en Tailandia]

Según Cuesta, "hay que ser muy cautos. Yo no dije nada de Yuyee hasta que ella ya estaba en la cárcel. Los europeos nos creemos que somos superiores, que sabemos más, y nos olvidamos que aquí tenemos derecho romano y allí tienen un derecho real. Las leyes son diferentes, los tiempos son diferentes y, sobre todo, los respetos son diferentes", continuó.

El naturalista apuntó a una diferencia de Tailandia respecto a España, según él: "Tailandia es un país al que si vas a vivir, tienes que respetar su cultura, sus tradiciones y su historia, mientras que si vienes a vivir a España no tienes que respetar ni nuestra cultura, ni nuestra historia, ni nada".

Frank Cuesta junto a Daniel Sancho. ATRESMEDIA

En ese punto, Cuesta quiso vaticinar cómo iría el juicio al hijo de Rodolfo Sancho: "¿Cómo va a ir el juicio? Yo no te puedo decir, pero los tailandeses lo tienen muy claro, desde la semana que pasó todo eso. Ahora, la defensa en España, tendrá que saber cómo lo tiene que hacer". En este sentido, señaló que el documental que prepara HBO Max sobre el caso no ayuda "porque fíjate lo que yo luché con Yuyee y al final tuvo que ser todo a nivel tailandés porque daba igual".

El youtuber recalcó que "Tailandia es un país diferente, con leyes diferentes, culturas diferentes. Cuanto menos se hable en los medios y, sobre todo, cuanto menos se insulte y se intente ridiculizar a los tailandeses, mejor. Pero cada uno sabe lo que hace". Cuesta consideró que el juicio no terminaría bien: "Yo no lo veo bien. Es decir, yo veo que va a ser, si tiene mucha suerte, cadena perpetua", sentenció.