Este lunes, Telecinco comenzaba a escribir un nuevo capítulo de su historia. A las 17:00, de forma exquisitamente puntual, arrancaba TardeAR, el nuevo formato de Ana Rosa Quintana para las tardes de la cadena. Un magacín que ha inaugurado en primer lugar tirando de inteligencia artificial, al igual que en sus promos, y después, con un homenaje a todas las grandes mujeres que han hecho la televisión de este país.

Así, en primer lugar, hemos visto una rejuvenecida Quintana, que decía: “Hola, soy Ana Rosa y llevo 35 años contando historias en televisión. La televisión es la vida de todos. La televisión es el hombre llegando a la Luna, es la Ruperta”, decía, emitiendo así en televisión el vídeo que se hizo viral días antes, y en que se usaba la tecnología del deep fake con la presentadora, que augura que a partir de ahora “la tele será TardeAR”.

Tras esto, Ana Rosa entraba vestida de blanco en el plató. “Buenas tardes a todos, bienvenidos a TardeAR. Bueno, la verdad es que como ha pasado el tiempo. Estas imágenes esta era yo, en Veredicto, hace exactamente 30 años. He cambiado. Y hemos cambiado todos, todo ha cambiado”, introducía, para dar la bienvenida a continuación al público que estaba en el plató.

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“A los espectadores que están en su casa, que no están viendo en el trabajo, sentados en el sofá tomando un café, en el iPad, en el teléfono o como sea, pero que estén con nosotros. Para mí hoy es una primera vez, otra primera vez después de 18 años dándoles los buenos días, pues hoy comienzo dándoles las buenas tardes”.

Ana Rosa continuó de nuevo hablando de cómo “la tele es la historia de las familias, es la historia de las mujeres, las mujeres de la tele, las pioneras de la pequeña pantalla que ya se fueron. Porque la televisión es Laura Valenzuela, la primera presentadora que hubo en España junto con la mítica Blanca Álvarez”, narraba la presentadora. Luego continuó ensalzando la figura de Pilar Miró, la primera realizadora y primera mujer en tomar las riendas de una televisión en nuestro país, Lolo Rico como la primera guionista, “la frescura y la ternura de Carmen Sevilla” o “la más grande productora empresaria y actriz Lina Morgan”.

“La televisión es la ironía y la rebeldía de Rosa María Sardá bajando las escaleras de ahí te quiero ver. La televisión es la profesionalidad la genialidad y las entrevistas de mi amiga Concha García Campoy la televisión con mayúsculas. Y Raffaella Carrà, la mujer que lo tenía todo: cantaba, bailaba, presentaba, nos levantaba del asiento. Y la tele es aquella niña llamada María Teresa que quería entrar dentro de la pantalla para contar historias. Porque la televisión es María Teresa Campos”, continuaba diciendo, sobre la presentadora recientemente fallecida.

“Ella fue la gran innovadora, una maestra que no solo introdujo la política en las mañanas, sino que renovó la forma de contar la vida en televisión. En Las mil y una noches, Scherezade le contaba una historia cada noche al Sultán, y el deseo por escuchar una historia nueva cada día hizo que el Sultán se enamorase de ella. Eso le pasó a España con María Teresa Campos. Allá donde estés, contando historias en el jardín junto a las mujeres pioneras, siempre serás historia de la tele y te quiero dedicar este primer programa. Hasta siempre, Teresa”, finalizaba Ana Rosa Quintana, antes de dar paso a sus colaboradores.