El Benidorm Fest y, posteriormente, el Festival de Eurovisión le han cambiado la vida a Blanca Paloma. "Cuando me llamaron para el primer Benidorm Fest, yo no tenía ningún vínculo entonces con la televisión. Y luego, fíjate, he hecho de la televisión una aliada que ha servido de plataforma para mostrar lo que tenía", explica la alicantina.

Así es. Gracias a ambos festivales, la cantante ahora tiene un nombre en la industria. También la firma con una gran discográfica para su primer disco. "Esto ha sido una gran ventana, la gente ya me conoce en España y fuera. Recibo muchísimos mensajes de apoyo de todas las partes y eso para mí es esperanzador. Hay gente de fuera que también quiere seguir descubriendo este género, que a lo mejor lo encontró por primera vez en Eurovisión".

Por eso, a pesar de su puesto 17 en Liverpool, tiene claro que ella ha triunfado. "Lo que he intentado transmitir a la gente es que la victoria se puede interpretar de muchas maneras. Para mí la victoria ha sido que, después de tanto tiempo, hayamos podido mandar una candidatura que era de nuestra raíz. Eso es un éxito".

¿Se cierra para ti un ciclo después de la presentación del Benidorm Fest 2024?

Nunca creo que deje de pertenecer a esta gran familia que es Eurovisión. Ahora estoy transicionando de toda esa emoción que hemos vivido todos y no creo que cierre el ciclo hasta que entregue el testigo oficial el próximo 3 de febrero. Ahora me toca centrarme en ese primer disco que me hace tanta ilusión y que requiere también de, o por lo menos en mi caso, una introspección para poder sacar lo mejor de mí. Muchas de las canciones ya están compuestas, ya las he cantado en directo e incluso algunos las han escuchado en algún concierto, pero otras están en proceso y están saliendo cositas nuevas. Es verdad que me sigo reconociendo en canciones como Plumas de nácar, que es la primera que escribí, pero también toda esta etapa, todo lo que he vivido, me ha enriquecido y me ha llevado a otros lugares. También sinergias que estoy viviendo en el estudio con diferentes artistas, productores... Y, por supuesto, José Pablo Polo siempre a mi vera.

Nunca creo que deje de pertenecer a esta gran familia que es Eurovisión.

Pudiste conocer a Massiel en Benidorm. ¿Te ves como ella dentro de 55 años no teniendo miedo a nada y diciendo lo que te da la gana?

Yo quiero ser libre y quiero también respetar porque una cosa no riñe con la otra. Y digo esto porque no solamente tengo un respeto profundo por la música, por eso me dedico a ella, sino también por todas las personas y todo lo que cada uno de nosotros piense. Lo hermoso de ser tan diferentes es que el mérito es convivir todos y vernos en un mismo mundo. Y de mayor, pues quiero ser más Blanca Paloma.

En este proceso de introspección que estás viviendo, ¿qué es lo que más te ha sorprendido? ¿te has descubierto cantando algún otro género?

Yo siempre tengo la premisa de ser fiel a mí misma. Soy una persona que tengo facilidad par adaptarme y fluir. Me gustan todos los géneros musicales, aunque obviamente mi voz empasta mejor con unos que con otros. Nunca voy a salirme de algo que sienta que no me representa. Eurovisión, por ejemplo, es la demostración de que debes ir con una propuesta personal y con la que te sientas identificada. Porque, cuando pase el tiempo, eso es garantía de no defraudarte a ti mismo, de que al ver esa actuación digas: 'Fui con mi canción y me sigo sintiendo orgullosa de lo que hice'. Más allá de los resultados, creo que mi propuesta tenía calidad y es por lo que voy a apostar en mi disco. En cuestión de géneros, la música electrónica va a seguir estando presente de la mano de José Pablo Polo y las personas con las que estoy haciendo sinergias creo que van a poder aportar también soniquete... En este laboratorio creativo en el que estoy, todavía no estoy preparada para este primer disco, pero están saliendo cosas con las que me estoy divirtiendo. 

Blanca Paloma.

¿Es difícil no dejarse tentar por los ritmos que parece que más venden ahora como los latinos o reguetoneros? O, por el contrario, precisamente es mejor dejarse tentar...

¿Por qué no? La verdad es que no es la música que más he escuchado, pero quizá en futuros proyectos a lo mejor entro más de lleno. Hay muchos precursores en estos géneros que han demostrado que se puede hacer todo género con calidad. Sin embargo, yo ya tenía canciones compuestas, que están inspiradas en la música de raíz y quizás todavía no encuentro la manera de que estén perfectamente empastadas. Pero, no me cierro. Respeto todas las músicas y creo que me puedo divertir mucho.

¿Te has puesto alguna fecha límite para el disco?

Los límites son muy importantes porque si no la cosa se puede ir dilatando. Antes de que acabe el año saldrá un single o singles y para el disco nos hemos dado de margen el año que viene. No voy a estar en un barbecho muy largo, porque me apetece seguir conectando con la gente y sacar cosas nuevas siempre mantiene la chispa prendida. Y luego es que el directo me alimenta muchísimo.

Hay gente de fuera que quiere seguir descubriendo este género, que a lo mejor lo encontró por primera vez en Eurovisión.

¿Has vuelto a ver tu actuación después de Eurovisión o has cerrado completamente esa página?

Es una etapa que me va a acompañar siempre. No tengo miedo de volver a ver la actuación. No la he visto porque me quedé muy tranquila y estoy orgullosa de haber llevado una propuesta arriesgada. Creo que los valientes fueron aquellos que la votaron. Y ojalá se sigan eligiendo propuestas así y la Marca España se asocie a la calidad. 

Cuando pasen unos años, ¿seguirás defendiendo tu paso por Eurovisión o habrá un cierto rechazo como han demostrado otros representantes?

Yo lo que he intentado transmitir a la gente es que la victoria se puede interpretar de muchas maneras. Para mí la victoria ha sido que, después de tanto tiempo, hayamos podido mandar una candidatura que era de nuestra raíz. Eso es un éxito. ¡A saber cuando volvemos a llevar algo así! Lo bonito sería poder mostrar toda nuestra diversidad. Este concurso es un reflejo de la sociedad y sus músicas. No siento que me penalice la posición en la que quedé porque mi carrera está toda por empezar. Esto ha sido una gran ventana, la gente ya me conoce en España y fuera. Recibo muchísimos mensajes de apoyo de todas las partes y eso para mí es esperanzador. Hay gente de fuera que también quiere seguir descubriendo este género, que a lo mejor lo encontró por primera vez en Eurovisión. En fin, yo creo que dentro de diez años voy a seguir sintiéndome muy orgullosa de lo que hemos hecho. Es una oportunidad de mostrar tu verdad y si no vas con algo muy auténtico, se ven las costuras.

¿Te han puesto ya una rotonda en tu pueblo?

El pueblo se volvió loco. Había pantallas por todos lados. Cuando volví, todo el mundo había mantenido los mantoncitos colgados de los balcones... Me he sentido súper acogida. Creo que mi pueblo ha entendido muy bien que ya era ganadora antes de ir.  Pero, insisto, yo no iba buscando reconocimientos, no iba esperando rotondas, iba a dar lo mejor de mí y eso ya está entregado. Y lo que queda. Los siguientes capítulos todavía están por llegar. Pido solamente un poquito de paciencia.

Carlos Higes, Blanca Paloma, Massiel y Sandra Valero.

Si TVE te ofreciera presentar el Benidorm Fest, ¿qué les dirías? 

La verdad es que no lo había imaginado. Sería una manera de seguir formando parte del Benidorm Fest. Si eso llegara a pasar, le daría una vuelta, igual que cuando me llamaron para el primer Benidorm Fest. Yo no tenía ningún vínculo entonces con la televisión y luego, fíjate, he hecho de la televisión una aliada que ha servido de plataforma para mostrar lo que tenía. Todo suma. ¿Presentar? Nunca he presentado nada. Pero no digo no. Pero, antes me gustaría dejar muy encaminado mi proyecto. 

No tenía ningún vínculo con la televisión y luego la he hecho una aliada que ha servido de plataforma para mostrar mi música

¿Y volverte a presentar como artista?

¿Por qué no? Ha sido muy buena experiencia, incluso Eurovisión. Sigo dándole al inglés, así que espero que si regresara, poder hablarlo y transmitir con todas las palabras. Básicamente porque Eurovisión también es un mundo en el que quieres conocer al artista, cuál es su universo... Yo tenía ciertos límites con el idioma, pero ha sido toda una experiencia hacerme entender. Si volviera, intentaría estar más preparada. 

¿Con qué palabra en inglés te quedas de las que hayas aprendido en estos meses?

Aprendí un lema que decía 'birds of a feather flock together' (Los pájaros de la misma pluma vuelan juntos) , que es algo así como el nuestro de Dios los cría y ellos se juntan. Es importante formar un equipo en el que te sientas arropado, que sean de la misma pluma porque hay mucho que volar.