Este lunes 17 de abril, a las 22:30, regresa Mi cámara y yo a Telemadrid. Uno de los programas más veteranos de la cadena autonómica vuelve con una nueva temporada en la que “abordará la realidad de los madrileños en primera línea”. El retorno de un veterano formato que se ha consolidado como uno de los emblemas del canal regional. “Creo que el motivo de que llevemos tantos años en emisión es porque a la gente le gusta verse reflejada y representada en su propia cadena de televisión autonómica, quiero pensar eso”, declara Paloma Ferre, directora del programa de reportajes.

El regreso de Mi cámara y yo busca ser por la puerta grande, literalmente, ya que abordará la realidad de la tauromaquia con Vivir del toro, con el que el programa plasmará toda la industria que se forma alrededor, mostrando un punto de vista distinto al esperado y haciendo honor así a su búsqueda por el relato que marque la diferencia. “En Mi cámara y yo siempre buscamos también temas que nos sorprendan. Nunca nos imaginamos que en Madrid habría tanta industria relacionada con la tauromaquia, como que haya 68 ganaderías dedicadas a la cría de toros y vacas bravas”, explica Ferre en una entrevista concedida a BLUPER, recalcando que se ha formado, incluso, una “ruta turística del toro” en la región.

“Descubrimos que hay fábricas de banderillas en el propio Madrid. Me dicen que esto sucede en Sevilla y lo veo lógico, pero lo había pensado de Madrid. Nos sorprendió mucho”, agrega. Precisamente en este primer episodio, se verá una de las innovaciones de esta temporada, la introducción de la cámara GoPro, que ofrecer “una experiencia inmersiva” a los espectadores. “En cada temporada, intentamos innovar e introducir novedades. Hace unas temporadas, pusimos el dron, que nos ha permitido grabar desde el aire y dar otra perspectiva. La GoPro ha sido una idea porque permitirá al público sentir la experiencia en primera persona del protagonista del reportaje”, expone.

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Y ese deseo de que el público conecte de manera más profunda con lo que se narra, se verá también en otro episodio dedicado al trabajo de los riders. “La GoPro muestra así lo que es ir en bicicleta por la Gran Vía para llevar un pedido. La cámara nos mostrará lo arriesgado y peligroso que resulta su trabajo, por ejemplo, al ver cómo pasa cerca de ellos un autobús. Buscamos sentir lo más cerca posible la experiencia de los protagonistas de los reportajes y transmitirla así a los espectadores”, detalla la directora, quien es defiende la importancia de este tipo de formato en los canales autonómicos y con vocación de servicio público.

“Esta es mi apreciación puramente personal, creo que para las televisiones locales y autonómicas, este formato de docushow, de salir a la calle, de contar en primera persona las historias de lo que sucede en Madrid y hacerlo justo mientras ocurre, debe ser ya un clásico. Es casi como los informativos, nadie va a dudar de que un canal tiene que tener informativos. Pues en nuestros casos, como cadenas autonómicas, es algo casi similar, nadie se imagina un canal de una comunidad sin programas que aborden el día a día de sus vecinos”, aborda.

Precisamente, Ferre de ejemplo otro veterano programa de Telemadrid, del que ella es directora y también sido creadora, Madrileños por el mundo. “¿Por qué sigue siendo el programa de Telemadrid que mejor prime time tiene desde casi 20 años? Porque la gente quiere ver a sus madrileños por el mundo, quiere ver a su vecino en Italia, a su hija que estudia en Dinamarca o a un marido que está destinado en Canadá. Los madrileños viajan mucho por el mundo y creo que estamos cubriendo una necesidad, tanto con Mi cámara y yo como con Madrileños por el mundo.

Ferre reivindica también la veteranía de Madrileños por el mundo y de cómo este se ha convertido en uno de los formatos que mejor funciona en Telemadrid, incluyendo sus múltiples reposiciones. “Madrileños por el mundo, que lleva ya 18 años en emisión, es un formato que ha crecido muchísimo y lo ha hecho porque hay muchos madrileños que están fuera de nuestras fronteras”, explica.

"Llevamos 19 años buscando nuevas historias y seguimos sorprendiéndonos"

“Es un auténtico milagro. No he visto un formato igual en mi vida. Tanto Mi cámara y yo como Madrileños por el mundo tienen varios reposiciones en la cadena y es que, en algunos casos, las reposiciones logran tener mejor dato que la emisión original, es alucinante”, continúa, remarcando que todo el equipo que hay detrás, “en el que todos son fundamentales”, sigue sorprendiéndose con las diferentes historias que tiene la Comunidad de Madrid. “19 años buscándolas y nos sigue llamando la atención”, expone.

Para Ferre, la veteranía de ambos formatos no es algo casual, sino fruto del apoyo del público, el cual se ha mostrado no solo fiel, sino demandando “conocer historias que le interesan”. “Insisto en que es lo que demanda la propia gente. Ejemplo de ello son los años que seguimos en emisión. En Telemadrid, ha habido muchos formatos a lo largo de todos estos años, pero Mi cámara y yo y Madrileños por el mundo son de los pocos que resisten con el paso del tiempo. La gente tiene esa necesidad, de conocer cosas nuevas de su ciudad, de su comarca, de ver cómo le va a sus vecinos y amigos de la región.

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Además de adentrarse en la tauromaquia y en las condiciones laborales de los riders, Mi cámara y yo guarda más temas para esta temporada y la propia Ferra aborda cómo el equipo sigue pensando en otros reportajes de cara al futuro. “Estamos abierto a todo lo que pasa en Madrid. Uno de los temas que queremos tratar es el turismo en Madrid, porque ha crecido muchísimo. Es verdad que venimos de un parón provocado por la pandemia en todo el mundo, pero en la capital ha crecido más de lo habitual”, detalla, comentando como Madrid se ha convertido en una capital de moda para el turista extranjero.

“A nivel internacional, está poniendo de moda Madrid y eso lo noto con Madrileños por el mundo. Antes salías al extranjero, decías Madrid pero la gente hablaba de Barcelona. Ahora es la capital la que está de moda, como le sucede a Lisboa. También hemos abordado la exposición de globos que está habiendo ahora en la ciudad o la Feria del Campo, que es bienal, o el tema de los ruralitas. La comunidad que más invierte en turismo rural es Madrid y nos pareció muy interesante y estamos investigando sobre ese tema, también los diferentes mercadillos que está habiendo más allá del Rastro”, adelanta.

"Madrid ha cambiado muchísimo en los últimos años"

Aunque tanto Mi cámara y yo como Madrileños por el mundo son dos programas de carácter autonómico, son formatos que han servido de inspiración para producciones tanto en el ámbito nacional (como Callejeros, Comando Actualidad o Españoles por el mundo) como en el internacional, con programas como Clase turista: el mundo según los argentinos o Siempre hay un chileno.

“Tanto Mi cámara y yo como Madrileños por el mundo fueron los pioneros. Es verdad que Telemadrid ha sido pionero con otros formatos, como Madrid Directo, que luego ha sentado escuela en otras cadenas de televisión, tanto en España como en el resto del mundo. Es alucinante que una televisión tan pequeñita exporte todos estos formatos. No es habitual en el audiovisual español y esto le suele ocurrir a las grandes producciones, cuyos costes son mucho mayores. Pero que hayan triunfado formatos locales, con mucho menor coste, es algo raro pero estupendo”, manifiesta la directora.

El llevar casi 20 años de emisión ha permitido a Mi cámara y yo ser un testigo privilegiado de la evolución de la Comunidad de Madrid en estos dos decenios. “Al llevar tanto tiempo, sí que tienes esa percepción de cambio, ves esa evolución. La hemos visto incluso con la forma de grabar, hace 19 años no teníamos toda la tecnología que tenemos ahora. Por poner un ejemplo, cuando surgió la tormenta Filomena, pudimos hacer el programa gracias a nuestros teléfonos móviles y al Metro, que no cerró”, argumenta.

“Madrid ha cambiado muchísimos y los madrileños también, cada vez somos más grandes. Antes no podías trabajar en el centro de Madrid y vivir en Segovia, en Toledo o en Valladolid. Ahora sí, porque está el AVE. Han sido tantos años que ves la evolución de la ciudad en muchas cosas”, continúa, recordando cómo cada reportaje del programa se ha convertido en cronista de cómo la ciudad y la comunidad han cambiado en estos años.

“La verdad que sí, porque salir todos los días a ver qué nos cuentan los madrileños, ver sus casas, sus calles. Ves uno de los primeros reportajes de cuando empezamos y alucinas. ¿Esto era Madrid? Es todo un fondo de documentación, un archivo buenísimo de las cosas que han sucedido en nuestra ciudad. Estamos muy orgullosos de eso, la verdad”, declara.