Que desde la emisión de la docuserie Rocío, contar la verdad para seguir viva, los propios programas, colaboradores e incluso productoras de Telecinco se han enfrentado sin esconderse, es una realidad. Indirectas, mensajes, choques entre tertulianos… la polémica en torno a la figura de Rocío Carrasco continúa.

Por un lado, están los que no compran del todo la versión que da Carrasco ya no solo de su experiencia vivida con el que fuera su marido, Antonio David Flores o la postura de ésta con sus hijos. Sino también con el retrato que hace de la inmensa mayoría de la familia de su madre. Y otros, que defienden a capa y espada lo que dice Rocío Carrasco, capaces de defenderla sin dudarlo ante la más mínima noticia o declaración en su contra.

Durante las últimas semanas, estos dos polos opuestos tienen dos caras muy reconocibles en Viva la vida, las de las periodistas Marina Esnal e Isabel Rábago que, debido a las sucesivas 'peleas' que viven en plató, todo apunta que incluso la simpatía personal de ambas es del todo menos existente. Ambas lo han vuelto a dejar claro este sábado en el programa que presenta Emma García y que emite sus últimos compases ante de su finalización en la parrilla de Telecinco. Viva la vida será sustituido, al menos este verano, por un nuevo magazine presentado por Frank Blanco y Verónica Dulanto, y producido por Unicorn Content, la productora de El programa de Ana Rosa y Ya es mediodía, entre otros espacios.

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No cabe duda que Marina Esnal se está convirtiendo en una de las colaboradoras necesarias de televisión, capaz de revolucionar cualquier plató con su punto de vista sobre el tema de Rocío Carrasco. Si la semana pasada vivía un enfrentamiento con otra colaboradora, Pilar Vidal, ayer era con Pilar Rábago, amiga personal y firme defensora de la hija de Rocío Jurado.

La discusión empezó cuando Esnal -que ya había visto el nuevo capítulo semanal de En el nombre de Rocío-, destacó un titular, “Rocío Carrasco, dos puntos, Raquel Mosquera sabe lo que bebió mi padre en nuestra última charla, se lo sirvió ella', ¿qué defensa tiene una barbaridad así?". Una pregunta que encontró respuesta en una alterada Isabel Rábago que acusaba a Esnal de sacarla de contexto, “¿Has visto el capítulo? ¿Sí? Pues entonces esa pregunta que estás haciendo es absurda”. Afirmación que no sentó nada bien a Marina que achacó a Rábago de defender todo lo que hace o dice Carrasco sin cuestionarla.

Rábago animó a Marina a contextualizar esa frase que acababa de decir, sin embargo, la tensión entre ambas fue a más. Lo que dejó entrever que la simpatía personal entre ambas está muy lejos de hacerse realidad. Tal fue la tensión entre ambas que Isabel Rábago terminó lanzándole una petición a Marina Esnal, “olvídate de mí, chica. Eres una faltona", a lo que Esnal fue clara, “no te voy a permitir que me cuestiones". Una vez más, Emma García tuve que mediar entre sus colaboradores.