¿Qué ha sido de Laura Lebrel? ¿Qué provocó que se alejara de sus antiguos compañeros? ¿Cómo es su vida actual? Los seguidores de Los misterios de Laura tendrán respuesta a estas y otras preguntas en El misterio del asesino inesperado, un capítulo especial de la comedia policiaca que La 1 emitirá este jueves 13 de enero, a partir de las 22 horas, y en el que la inspectora tendrá que investigar un nuevo caso, en esta ocasión para demostrar su propia inocencia.

Con guion de Javier Holgado y Carlos Vila, creadores de Los misterios de Laura, y dirigida por Pablo Guerrero, el equipo de la serie regresa con el deseo de que RTVE se atreva a dar luz verde a una nueva temporada de esta serie producida por Veranda TV (Grupo Mediawan). 

Si Los misterios de Laura te dice ven, ¿lo dejas todo?

Han sido trece días de rodaje. Como es un capítulo especial, con toda la alegría y toda la sorpresa, estuve encantada de la vida de volver. Estábamos muy sorprendidos. Todos dijimos que sí y felices de poder hacerlo. 

¿Era algo que dabais por perdido?

Sí. Había pasado mucho tiempo. 

Qué bien haber podido encajar todas las agendas...

Lo más difícil es que hayan encargado un capítulo especial. Ese ha sido el gran logro. Y tiene mucho que ver con la insistencia y cómo la serie ha mantenido al público vivo.  Y también los fans y la prensa de televisión que la han mantenido viva. La gran dificultad que era que volviera a suceder y, entonces, todos de cabeza. 

Y además darle sentido a la vuelta... 

La dificultad era volver a hacer la serie reconocida por la gente que era seguidora y, al mismo tiempo, ponerla en el presente. No podíamos hacer la misma serie porque ha pasado el tiempo y muchas cosas. Eso le ha pasado al público, al mundo, a los personajes. Y con muy buen criterio, de manera inteligente y mantiendo su espíritu juguetón, los guionistas han hecho esta traída de la serie al presente muy reconocible.

María Pujalte y Beatriz Carvajal.

Dejáis la puerta abierta a nuevas tv-movies o temporadas. ¿Te embarcarías?

¡Claro! Después de que se haya producido este milagro cómo para no dejarla abierta. Si te la cierra, la está cerrando otra persona. Vamos a cruzar los dedos y a ver qué pasa. 

Todas las televisiones públicas tienen una serie de detectives y a TVE le falta... 

Tuvo la marca en un momento en la que fue mucho más novedoso. Vimos cosas después que tenían que ver con lo que habíamos hecho nosotros. 

Ahora además tenemos a las plataformas rescatando series del pasado y creando nuevas oportunidades...

Digamos que hay más espacio para muchísimas más cosas. Son espacios que se abren que ya no sólo tiene que ver cuándo hacíamos ficción para cuatro cadenas. Está claro que hay más contenido y más variedad. También TVE está estrenando su plataforma, lo cual no deja de ser interesante. Sería una alegría muy grande que hiciéramos una temporada.

¿Laboralmente lo has notado?

Por un lado hay más variedad temática y de formato. Se está abriendo mucho más el relato con los movimientos feministas dando pie a un punto de vista femenino y a personajes con distintas edades. Y eso para mí es de agradecer. Yo estoy en mis 50 y estoy trabajando y haciendo personajes bonitos y con enjundia. También es verdad que cuando hacías televisión trabajabas dos años con la misma serie. Eso ahora se ha terminado. Antes eran jornadas muy largas y ahora haces una serie en tres meses. Hay más de todo, pero tampoco se ha multiplicado en la misma proporción los dineros. Yo no me puedo quejar, pero los tiempos cambian. 

Ahora que vuelve Los Misterios de Laura, ¿verías también un regreso de Periodistas?

Fue una serie mítica. Para mí fue donde aprendí a hacer televisión, a saber lo que era estar en un plató. Fue una facultad. Yo hice 104 capítulos en cuatro años. Eso fue muy intenso y muy gratificante. Si se tratara de rescatar Periodistas, hacer un retrato del periodismo en el día, no sería una serie tan amable. 

Mucho más amargo... 

En aquel momento algunos periodistas también nos decían que aquello no era la realidad. Pero se trataba también de hacer una serie familiar, más dulcificada.