La piscina termal más grande de Europa está en Zaragoza: escondida en un bosque y con un espectacular balneario

Aragón, una comunidad autónoma en el noreste de España, destaca por su impresionante riqueza natural y cultural. Cada una de sus provincias alberga paisajes de ensueño, historia milenaria y una gastronomía que deleita los paladares más exigentes. Para quienes buscan una escapada que combine naturaleza, bienestar e historia, Aragón se presenta como un destino inigualable.

En la provincia de Zaragoza, en pleno corazón de la comarca de Calatayud, se encuentra Alhama de Aragón, un tesoro natural que combina historia, belleza y bienestar. Esta localidad es reconocida por sus aguas termales, cuyas propiedades curativas han sido aprovechadas desde tiempos romanos.

Durante la dominación musulmana, el lugar recibió el nombre de "Alhama", que en árabe significa "fuente termal". Hoy en día, sus estrechas y sinuosas calles reflejan vestigios de esta rica historia, destacando la torre de una antigua fortaleza que domina el paisaje.

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A poco más de una hora de Zaragoza, el lago de Alhama de Aragón es, sin duda, el gran atractivo turístico de la localidad. Ya lo fue en la época romana y posteriormente en la musulmana, pueblo que bautizó a la ciudad aragonesa con el nombre de Alhama (fuente termal).

La localidad se encuentra a 664 metros sobre el nivel del mar, sobre una línea de fracturas tectónicas y atravesado por el río Jalón, hace que a su alrededor, a partir del siglo XIX, se construyeran lujosos balnearios que se nutren de las aguas termales de la zona.

La piscina termal más grande de España

En el corazón de Alhama de Aragón se esconde un tesoro natural único: el lago termal más grande de España y uno de los mayores de Europa. Con 140 metros de diámetro mayor y 80 metros de menor, esta piscina natural de aguas mineromedicinales mantiene una temperatura constante de 34°C durante todo el año.

Lo que hace especial a este lago es su renovación continua cada 32 horas, gracias a los manantiales subterráneos que lo alimentan. Aquí puedes nadar entre aguas termales, relajarte con los chorros de agua terapéutica o sumergirte en la zona de burbujas, que proporcionan un masaje natural en las piernas. Además, cuenta con una zona de fango medicinal, perfecta para disfrutar de un tratamiento natural para la piel.

Rodeado por un frondoso bosque de 70.000 metros cuadrados, el Balneario Termas Pallarés ofrece un entorno romántico e inspirador, perfecto para desconectar del estrés diario. Este paisaje, lleno de historia y tranquilidad, transporta a otra época, convirtiéndolo en un destino ideal para una escapada de bienestar.

Más allá de su belleza, este lago termal atrae cada año a visitantes que buscan mejorar su salud. Sus aguas, de mineralización media, sulfatadas y bicarbonatadas, tienen efectos beneficiosos para dolencias articulares, problemas respiratorios y contracturas musculares. Además, al mejorar la circulación sanguínea, proporcionan un efecto analgésico y relajante ideal para aliviar el estrés y la fatiga.

Programa de Termalismo Social de la Diputación de Zaragoza

Para quienes desean beneficiarse de las propiedades terapéuticas de las aguas termales, la Diputación de Zaragoza ha lanzado su programa de termalismo social 2025. Este programa ofrece 1.665 estancias subvencionadas en balnearios de la provincia, con descuentos de hasta 300 euros por estancia.

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Está dirigido a mayores de 60 años, pensionistas, personas con al menos un 60% de discapacidad o con grado II de dependencia. El segundo plazo de inscripción se abrió el 17 de febrero y estará disponible hasta el 28 de febrero, o hasta agotar las plazas.

Los balnearios participantes incluyen Alhama de Aragón, Balneario La Virgen, Termas Pallarés y Paracuellos de Jiloca. Las solicitudes pueden realizarse electrónicamente a través de la sede electrónica de la Diputación de Zaragoza.