La Guardia Civil de Alicante acudió este jueves a un aviso por tres personas en peligro en la Playa Centro de Guardamar del Segura (Alicante). Una mujer se había metido en el agua para ayudar a salir a su hijo pequeño sin éxito. Un testigo que se lanzó a ayudarlos, fue arrastrado también por las olas. Afortunadamente, el aviso inmediato dado por los testigos y la pronta respuesta de los Cuerpos de Seguridad y Emergencia permitió que la situación se resolviera con éxito.

A las 17:55 horas, dos agentes del Puesto de la Guardia Civil de Guardamar del Segura recibieron un aviso mientras se encontraban de servicio: tres bañistas estaban en riesgo en la Playa Centro. Los agentes de la Guardia Civil se desplazaron de inmediato hasta el lugar, junto al resto de Cuerpos de Seguridad y de Emergencias activados a través de la llamada de alerta al 112 que realizaron los testigos.

Al llegar a la playa, los dos agentes corrieron hasta el tumulto. Uno de ellos, se arrodilló junto al cuerpo de una mujer que se encontraba en la orilla e inició las maniobras de reanimación cardiopulmonar logrando que ésta expulsara el agua que tenía en las vías respiratorias y consiguiendo mantenerla con vida hasta la llegada de los servicios sanitarios.

El otro agente de la Guardia Civil, sin pensarlo, se adentró en el agua para alcanzar al hombre que, aunque agarrado a un flotador salvavidas que le habían lanzado, se encontraba exhausto, con la cabeza sumergida, y arrastrado por la corriente que le impedía salir. Lo agarró fuertemente y tras varios intentos logró sacarlo hasta la orilla. Aunque aturdido, se encontraba consciente.

Según el relato de los testigos, el hijo pequeño de la mujer se estaba bañando y el oleaje comenzó a arrastrarlo mar adentro. La madre se metió en el agua para sacarlo y fue arrastrada también. En ese momento, un grupo de jóvenes que contemplaba la escena acudió en su auxilio, quedando uno de ellos también atrapado por la marea.

Los auxiliados son un hombre de 24 años, de nacionalidad marroquí, y una mujer de 36 años, de nacionalidad ucraniana, que tuvo que ser trasladada al Hospital de Torrevieja para su estabilización. En la mañana de hoy continúa ingresada aunque no se teme por su vida. El niño fue trasladado al hospital con su madre, y esta mañana ha sido dado de alta en buen estado de salud.

En Font de la Figuera

Por otro lado, agentes del Consorcio de Bomberos han rescatado a un hombre de 50 años que se había lesionado dentro de una cueva en La Font de la Figuera (Valencia). El acompañante de este excursionista avisó al servicio de Emergencias que el herido se encontraba a unos cinco metros de profundidad en la denominada Cueva Santa, y al lesionarse el pie no podía salir.

La petición de ayuda se recibió sobre las 16 horas del jueves y hasta allí el Consorcio movilizó a su Grupo Especial de Rescate en Altura GERA, a bomberos voluntarios de Vallada y bomberos forestales de la Generalitat.

Una vez en el interior de la cueva, los bomberos inmovilizaron al hombre y lo aislaron térmicamente para evitarle el riesgo de hipotermia. Paralelamente prepararon la instalación de cuerdas para poder extraerlo, una operación que fue complicada por que el hombre estaba en el fondo de una especie de ranura.

Posteriormente, lo han extraído hacia una zona de la cueva más amplia donde ya podían portearlo hasta la salida, de la que los separaban unos 25 metros.

Ante lo abrupto del terreno, los agentes intervinientes decidieron que el traslado del herido hasta la ambulancia tenía que ser vía aérea, por lo que la evacuación se ha realizado con un helicóptero de rescate de Generalitat.

Las asistencias sanitarias comprobaron que el hombre presentaba fractura de tibia y peroné, por lo que fue trasladado en una ambulancia de Soporte Vital Básico hasta el Hospital de Almansa, según ha informado el Centro de Información y Coordinación de Urgencias (CICU).

El pasado 18 de mayo, EL ESPAÑOL de Alicante publicaba un artículo 'Primavera negra en Alicante: muere ahogado un anciano en Torrevieja, el sexto en dos meses'. Por suerte en los dos rescates descrito antes se pudo sacar a la persona del agua antes de que fallecieran, en el caso de los jóvenes de la playa de Guardamar del Segura, ya presentaban problemas para respirar.