Un joven de 22 años ha sido detenido en Elche por atentar contra una agente tras estar involucrado en una pelea. El hombre se negó a identificarse por el suceso y aparto con fuerza el brazo de un agente que se disponía a realizarle un registro superficial, oponiendo "gran resistencia" a su arresto y golpeando con la cabeza y dando patadas el coche patrulla.

La Policía Local de Elche ha informado en un comunicado que la detención se produjo cuando fue requerida en la calle Hermanos Navarro Caracena una dotación de vigilancia que había sido alertada de una pelea entre varias personas con un cuchillo de por medio.

"Con carácter de urgencia", han señalado, varias unidades acudieron al lugar y encontraron a un grupo de personas que retenía a un sujeto y a un varón que sangraba de la mano derecha debido a un corte.

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Según indicó el herido, se encontraba en la cafetería junto con unos amigos cuando llegó "un grupo de unas siete personas que ocupaba una vivienda de la zona y comenzaron a pelear con ellos".

Los testigos confirmaron la declaración y aseguraron que el portador del cuchillo había huido cuando llamaron a la policía y no era el joven detenido, que durante su traslado llegó a descuadrar el marco de una de las puertas traseras por la violencia de sus golpes.

El cuerpo policial ha confirmado que la persona herida fue trasladada al hospital y aseguró que el responsable de las heridas era el mismo que hacía unos días había intentado robar a su amigo. Así, mostró una fotografía y la persona fue reconocida por los agentes ya que ese mismo día había sido propuesto para sanción por beber en vía pública y por falta de respeto.

Seis robos en un gimnasio

Una mujer de 58 años ha sido detenida en Elche por seis robos con fuerza en las taquillas del gimnasio del que era usuaria, donde presuntamente se apropió de móviles, joyas y dinero en efectivo, y también por un delito de tráfico de drogas.

La Policía Nacional de la Comisaría de Elche comenzó la investigación tras recibir seis denuncias de afectados por robos similares cuando practicaban actividad física en un centro deportivo, según han informado este miércoles fuentes del cuerpo en un comunicado.

La implicaba "fracturaba los candados de las taquillas" y sustraía las pertenencias, por lo que los agentes estudiaron las ubicaciones de los dispositivos móviles sustraídos y los accesos informatizados de los clientes del gimnasio, al tiempo que visionaron las cámaras de seguridad del recinto.