El gobierno municipal de Elche, formado por el PP y Vox, ha aprobado este jueves la reducción de ordenanzas fiscales con el objetivo de que entre en vigor a partir del 1 de enero de 2024.

En concreto, la Junta Local de Gobierno ha acordado reducir un 1 % el impuesto de bienes inmuebles (IBI) y un 1,5 % el de Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM), el impuesto sobre actividades económicas (IAE) y el Impuesto sobre Construcciones y Obras (ICIO).

Según ha explicado este jueves en rueda de prensa el alcalde de Elche, el popular  Pablo Ruz, esta reducción de impuestos tendrá que ser ratificada en el pleno extraordinario del próximo día 17 de octubre para que entre en vigor en el próximo ejercicio.

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No obstante, el gobierno local ha anunciado una rebaja "progresiva" de impuestos hasta 2027, con el objetivo de que el IBI para entonces descienda un 5 %.

"Esta bajada progresiva la vamos a aplicar durante toda la legislatura en todos los impuestos", ha destacado Ruz.

La bajada de impuesto supone una merma en los ingresos de las arcas municipales de aproximadamente 1,5 millones de euros y el gobierno local no ha especificado qué partidas presupuestarias reducirá para compensar, aunque sí ha adelantado que "no tocarán las sociales".

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"Es un acuerdo de este gobierno no recortar en gasto social. Las partidas a familias más vulnerables no se tocarán, en todo caso, se aumentarán si es necesario", ha afirmado, por su parte, la edil de Familias, Aurora Rodil.

El gobierno local "ha blindado" las ayudas al recibo del IBI y al agua en los próximos presupuestos. 

El concejal de Estrategia, Francisco Soler, ha precisado que a partir del 1 de julio de 2024, volverá a cobrarse la tasa de mesas y sillas, congelada por el anterior gobierno local (PSPV-PSOE y Compromís), a consecuencia de la crisis sanitaria de la Covid.

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"Volvemos a la normalidad y, con ello, al pago de impuestos con normalidad. La suspensión estaba prevista el 31 de diciembre y la prorrogamos seis meses para que los negocios se adapten", ha dicho Soler.