El sector del leasing (alquiler de productos con opción a compra) y del renting (alquiler por un tiempo determinado) llevan años experimentando un crecimiento en España, un país donde culturalmente la propiedad es importante. En la provincia de Alicante movió 137,5 millones de euros en 2022, lo que supone un descenso de 10 puntos respecto al ejercicio anterior por la recuperación aún incompleta del turismo, pero que apunta a remontada durante este año: en el primer trimestre se ha invertido un 29% más en operaciones de leasing, y un 7,62% en renting. En toda la Comunidad Valenciana la inversión en leasing superó los 643,8 millones.

En este sentido, la Asociación Española de Leasing y Renting (AELR), ha celebrado esta semana en la capital provincial su 56ª Asamblea, y su presidente, José Coronel de Palma, ha atendido a EL ESPAÑOL para valorar los retos y oportunidades que presenta el sector en un escenario marcado por la inflación y la guerra de Ucrania. 

La inversión en leasing cayó diez puntos en la provincia de Alicante en 2022. ¿Cómo han influido en el sector factores como la inflación o la guerra de Ucrania?

La guerra de Ucrania no ha afectado en todas las comunidades por igual, pero sí que ha creado una cierta incertidumbre, El empresario tiene que tener una estabilidad y una seguridad. No tenemos que olvidar que las inversiones en la Comunidad Valenciana y en particular en la provincia de Alicante están muy enfocadas hacia el turismo y el sector servicios, y ambos se han visto afectados por un cierto factor de incertidumbre. Hoy por hoy Alicante, como el resto de España, está remontando. Igual que en la inversión de leasing estamos como en los años prepandemia, el sector turismo está igual que antes de 2020.

¿Se está estabilizando la económica de las empresas?

Sí, se está estabilizando, e incluso sabemos por el Banco Central Europeo que los datos que hay en España son mejores de los esperados. La última inflación que nos han confirmado es de un 4%, que, aunque sigue siendo muy alta, es la mitad que había el año pasado.

¿Cómo está influyendo la subida de tipos de interés al sector?

Afectan a todo el mundo, porque los préstamos hay que pagarlos más caros. Se está viendo que afecta muchísimo a la financiación de consumo y a las hipotecas. Al leasing y al renting, como la inversión hay que hacerla tarde o temprano, pues está afectando menos, en el sentido de que hay que hacer ese gasto, aunque obviamente está resultando más caro. Eso repercute en los precios, pero hoy por hoy en la demanda no, como se ve en los crecimientos que estamos experimentando.

¿Cuáles son las particularidades que tiene el sector en la provincia de Alicante?

En la provincia de Alicante hay una subida superior a otros sitios en el tema del renting, tanto de vehículos industriales como de turismos. Es cierto que en 2022 los porcentajes cayeron respecto al año anterior, pero muchos de estos descensos no son por un problema del renting sino de la disponibilidad del producto. Una vez solventado esto la evolución está siendo muy positiva.

En España parece que la cultura siempre ha tirado más a pagarlo todo de golpe, mientras que el leasing y el renting era una figura más anglosajona. ¿Es Alicante un territorio fértil para el crecimiento de este tipo de productos teniendo en cuenta el porcentaje de población extranjera?

Todo viene relacionado con el turismo. Sí que es cierto que en Alicante hay un porcentaje altísimo de extranjeros, y sí que es verdad que el porcentaje de Producto Interior Bruto destinado al leasing o al renting en otros países es muy superior al que se destina en España. Eso quiere decir que culturalmente está mucho más arraigado en países como Francia, Italia o Inglaterra que aquí.

¿Y ha notado un cambio de tendencia en los últimos años en España?

Más que un cambio de tendencia, un crecimiento. Es un tipo de producto que se usa mucho por todas las facilidades que tiene. Sí que se están notando mayores incrementos en el renting que en el leasing por dos factores: primero, es un producto con mayor juventud, más novedoso, por lo que siempre es más fácil crecer cuando la base es más baja; y segundo el leasing solo se puede dedicar a los profesionales y a las compañías y el renting llega también a los particulares.

¿Cuáles son los principales sectores?

Hoy en día con toda la revolución que está habiendo en la automoción hay mucha gente que se está decantando por este sistema. De cada diez coches que se matriculan dos se hacen con renting. Pero no nos podemos olvidar tampoco del sector tecnológico. Hoy muchos teléfonos móviles tienen un precio que hace que a la familia media española le cueste pagarlos al contado, por lo que tienen un renting con la compañía telefónica que les cuesta 20 o 30 euros al mes.

En general ustedes sirven también para comprobar la salud de las empresas. ¿Han notado una evolución en el último año, y también respecto a la pandemia?

Nosotros siempre decimos que el leasing es el termómetro de la economía. Y nos basamos en que, cuando hay menos inversión, estamos en la antesala de una posible recesión, y cuando vemos que sube es que el empresario percibe una estabilidad económica. Y a día de hoy en el leasing hay mucha confianza y mucho crecimiento, y además hay dos factores que lo refuerzan: en el primer trimestre estamos creciendo con dos dígitos y el número de impagados está prácticamente en mínimos [la morosidad en el sector en 2022 fue del 3,6 %]. Tenemos una cartera muy solvente, y podemos decir que los empresarios hoy se sienten seguros.

¿Qué perfil de empresa suele acudir al leasing y al renting?

Nosotros se lo ofrecemos a todos, pero el 90 % de nuestros clientes son pequeñas y medianas empresas. Suelen acudir empresarios que ya conocen el sector y que son conscientes de las facilidades del leasing: nosotros financiamos el 100 % de la inversión, a diferencia de los bancos, a largo plazo y a un tipo de interés fijo. También tiene ventajas fiscales. El tipo de cliente que nos viene al renting lo que busca son servicios, es decir, que quiere tu producto y que lo incluya todo, como reparaciones o seguro; y es un cliente que quiere ese bien para una obra determinada.

¿Cuál es la principal ventaja de adquirir un producto por renting, por ejemplo un coche, en lugar de comprarlo directamente?

En el caso de un coche, en primer lugar, no estás expuesto al riesgo tecnológico o a que se quede obsoleto, ya que el propietario y responsable es la empresa de renting. Cuando tú adquieres un coche o una furgoneta, tú asumes ese riesgo, algo que estamos viendo que se puede producir con los cambios en la legislación medioambiental cada pocos años. Y hay que tener en cuenta que el coche es la segunda inversión que hacemos los españoles, después de nuestra casa, por lo que el riesgo es mayor. Con el renting te garantizas tener siempre la última tecnología.

¿Y los precios?

Yo te puedo poner un ejemplo directo: tengo todos mis coches en renting, y hace 15 años los compraba. Hice números y, poniendo ese dinero en un depósito al 2 %, al final me salía más barato el renting. Por poco, pero es que además así no asumía ningún riesgo.

¿Pero al final en España se impone la mentalidad de ser propietario?

Como hemos dicho, las cosas están cambiando. Ese aumento de la cuota de mercado lo puede ver cualquiera. Hace cinco años ninguno de nuestros amigos hablaba de renting, parecía que estaba fuera de nuestra mentalidad. Y ahora todos conocemos a alguien que utiliza ese sistema. En Europa lo que sí que pasa es que la gente está dejando de tener coches y lo que hace es alquilar para viajar, algo a lo que aún no hemos llegado aquí.

¿Cuál es la tendencia actual en la financiación de los productos?

Depende de la época. Hemos financiado desde incineradoras hasta desaladoras o los famosos huertos solares. Aviones, barcos... Ahora la tendencia son los productos relacionados con la sostenibilidad. Toda la economía a nivel mundial está cambiando hacia esa tendencia, y va a seguir ene l futuro.