"¡Qué alegría!" Fueron las primeras palabras que salieron de forma espontánea de la boca del presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, al verse rodeado de los jugadores y técnicos del Hércules durante la recepción oficial al equipo alicantino, celebrada este miércoles en Valencia, tras su reciente ascenso.

Mazón, herculano de cuna y nieto de un expresidente, confió en que lo vivido el pasado domingo en Alicante sea "un punto y aparte para el Hércules" y agradeció, con ironía, no haber estado presente en el Rico Pérez, ya que eso le evitó "una arritmia o un fallo cardiaco", en alusión a la tensión que se vivió en el partido. "No estuve, pero sí estuve. Como he estado toda mi vida", añadió.

El presidente, que dijo estar "orgulloso" de su equipo, estuvo acompañado en la recepción del vicepresidente y conseller de Cultura y Deporte, Vicente Barrera. Ambos fueron obsequiados con una bufanda conmemorativa del ascenso y una camiseta del equipo, ambas con el número 10, firmadas por todos los jugadores.

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"Si me hubieran dicho hace un año cuál sería mi final ideal de mi primera temporada en la Generalitat, habría dicho esto: el ascenso del Hércules", comentó Mazón, quien se congratuló de los éxitos deportivos de los clubes de la Comunitat, como el Castellón, si bien dijo que el del club alicantino es "especial".

"Todos los deportistas valencianos son hijos de esta casa y les doy siempre la enhorabuena, pero en esta ocasión la enhorabuena me la dan a mí por ser herculano", afirmó Mazón, siempre con su bufanda blanquiazul al cuello, quien recordó que para él el Hércules es un "sentimiento especial" vivido desde su infancia junto a su padre y su abuelo.

"He visto jugar a Kempes en el Rico Pérez, a Peña y a Barroso (ambos presentes en el acto en el Palau). Hemos reído, sufrido y llorado en este estadio", añadió Mazón, quien le dio las gracias a la plantilla por el ascenso y por haber sabido llevar el peso de jugar en un club histórico.

"Esperemos estar aquí el año que viene, porque el Hércules juega a la ambición de una ciudad que no puede ni quiere parar", reiteró el máximo dirigente autonómico, quien desveló el herculanismo, gracias a la composición del Gobierno y del equipo de Presidencia, campa a sus anchas por la Generalitat y el Palau, en alusión a la cantidad de alicantinos y herculanos que forman parte de su círculo íntimo.

"Me alegro de este primer paso, que siempre es el más difícil. Y de este cambio de tendencia. Espero que sea la primera recepción de muchas otras", sentenció Mazón.

Ambición herculana 

Carlos Parodi, por su parte, deseó no tener que esperar tantos años (14) para una recepción oficial de la Generalitat y confió en que la próxima pueda ser "el año que viene por estas fechas". El presidente del Hércules se alegró de que las nuevas generaciones de alicantinos hayan podido disfrutar de un ascenso "sin que se lo contaran" y garantizó que el Hércules tiene "un futuro asegurado".

Carlos Mazón recibe una camiseta del Hércules.

"El Hércules es un sentimiento por encima de la categoría en la que esté. Hemos esparcido el herculanismo por la ciudad y la provincia y el tamaño de la respuesta lo nos compromete y alienta", indicó Parodi, quien agradeció el aliento de todos los aficionados, patrocinadores y de la familia Ortiz, propietaria de la entidad.

El capitán del Hércules, Nico Espinosa, agradeció el incansable apoyo de los seguidores herculanos, a los que calificó como "el corazón del club". "Espero volver el año que viene aquí porque supondrá que hemos ascendido al fútbol profesional", sentenció. Mazón finalizó el acto con la frase "macho Hércules", grito de apoyo popular al equipo, que dio paso a las notas del himno del conjunto alicantino.

Diputación

Horas antes, la plantilla del Hércules también realizó una visita oficial al presidente de la Diputación Provincial de Alicante, Toni Pérez, quien destacó que el equipo ha logrado devolver "la ilusión" a su afición tras varios años de decepciones.

"Es un honor contar en nuestra provincia con un conjunto como el vuestro, ejemplo de esfuerzo, sacrificio, trabajo en equipo y espíritu de superación", añadió Pérez. Durante el acto, celebrado en el Salón de Plenos, el presidente entregó a los jugadores una réplica del Palacio Provincial, "para que siempre os acordéis de lo orgullosa que vuestra tierra está de todos vosotros".

La plantilla ha entregado al presidente de la Diputación una camiseta del Hércules con su nombre y el número 10 en la espalda. "Enhorabuena por este merecido ascenso, tras el cual estamos convencidos de que vendrán muchas más alegrías y éxitos deportivos, tanto para el club como para la ciudad", sentenció Pérez.

Los jugadores del Hércules cerrarán los actos institucionales este jueves con la visita al Monasterio de la Santa Faz (12:00 horas). Tras la visita, y salvo sorpresa de última hora, el equipo comenzará oficialmente sus vacaciones de verano.