A Lolo Escobar no le asusta la actual dinámica deportiva e institucional del Hércules. El nuevo entrenador blanquiazul sabe perfectamente dónde se mete y conoce la nube tóxica que rodea a la entidad desde hace tiempo. No promete nada, solo intentar ganar el domingo y recuperar poco a poco la moral y la confianza del equipo, actualmente bajo mínimos.

"Veo esta etapa como una oportunidad y estoy contento de formar parte de un club centenario", asegura el pacense, quien ha desvelado en su presentación que el Hércules y el Recreativo de Huelva eran sus únicas opciones para entrenar en Segunda Federación. Hablar de la primera plaza o especular con la promoción está, de momento, prohibido. "Ahora mismo estamos centrados en ganar el domingo. Hay que ganar para rearmar al equipo de sensaciones y confianza y para enganchar a la afición a un proyecto que está tocado de ilusión", afirma.

"Esto es como una escalera y hay que ver cómo subimos el primer escalón. El peldaño del domingo es fundamental. Hay que ser realista y pensar en el domingo", insiste el preparador, que se encuentra al equipo en zona de promoción de permanencia cuando el objetivo al inicio del curso era pelear por el liderato, ya a 12 puntos de distancia.

Tocados y dolidos

Lolo Escobar ha encontrado a los jugadores del Hércules "tocados" en el aspecto psicológico y "dolidos" en el anímico. "Somos un animal herido y eso puede ser peligroso", señala el extremeño, quien no ocultó que le preocupa el estado físico de la plantilla. "El equipo está roto por las lesiones. Si le quitas nueve jugadores a cualquier equipo del mundo es otro diferente", advierte el preparador, quien anuncia que tiene una forma de entender el fútbol diferente, "ni mejor ni peor", que su antecesor en el cargo, Ángel Rodríguez.

[Peña carga con la confección de la plantilla y confía en el mercado para mejorarla]

El nuevo entrenador está seguro de que el Hércules acudirá al mercado de invierno para reforzar la plantilla. "El club no se va a quedar como está, por eso cambia de entrenador e intentará mejorar", ha explicado.

El entrenador ve "en todo" similitudes en la etapa que va a iniciar en el Hércules con la que ya vivió en Salamanca. "Es club histórico, que ha estado en Primera y solo con llegar al estadio ya se respira otra cosa", señala el preparador, quien garantiza que no se siente intimidado por los grandes retos. "En Salamanca perdí dos partidos en seis meses. Ojalá se pueda repetir aquí", ha deseado.

Lolo Escobar conoce el estado de crispación de la hinchada herculana, a la que entiende y no le pide nada. "La magnitud del proyecto hace que la gente se pueda ilusionar. No son ellos los que tienen que dar, sino nosotros", explica el entrenador, quien espera que el domingo ante el Deportivo Aragón, ya se pueda ver a un equipo muy diferente al de las últimas jornadas.

"Me gustaría que hubiera un cambio de dinámica y de actitud y que las cabezas estén limpias. Cuando las cosas no salen, las cabezas se van ensuciando. Espero un Hércules diferente a lo que se vio el otro día", sentencia Escobar, que espera cerrar "con trabajo" la sangría defensiva que sufre el equipo herculano.

El nuevo entrenador ha sido presentado en sociedad por Paco Peña, secretario técnico del club, que ha agradecido a Escobar haber aceptado el reto en una situación "que no es fácil". "Ve esta etapa como un reto ilusionante y ha estado siguiendo el proyecto", apunta el extremeño, quien también ha agradecido a Ángel Rodríguez los servicios prestados durante los últimos seis meses.