El conjunto de la Vega Baja, que apeó por penaltis al Nàstic de Tarragona en la primera ronda, recibirá, entre el 5 y el 7 de diciembre, ha tenido como recompensa una eliminatoria ante a el conjunto que entrena Míchel, uno de los rivales más deseados de los que había en el cuadro junto a Sevilla, Betis, Real Sociedad, Athletic Club o Valencia, los históricos de la competición.

Curiosamente, entre ambos equipos ya hay un precedente en la temporada 2006-07, también ha partido único, pero en Girona. Eran otros tiempos, con el conjunto catalán en Tercera y el Orihuela en Segunda B. Los amarillos se impusieron en Montilivi por un contundente 0-4.

La diferencia hoy en día entre ambos equipos es enorme, pero el Orihuela, décimo clasificado del grupo 4 de Segunda Federación, a tres puntos del descenso, ya ha demostrado ser capaz en su estadio de plantar batalla ante cualquier rival.

Linares y Málaga

Menos fortuna ha tenido el Elche, al que le espera un equipo áspero en un escenario siempre complicado como Linarejos. El equipo ilicitano se medirá a un rival de Primera Federación que actualmente ocupa plaza de descenso.

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No hay precedentes coperos entre el Linares Deportivo y el Elche. Además, ambos conjuntos llevan cuatro décadas sin cruzar sus caminos en competición oficial. Los últimos precedentes ante el Linares se remontan a cuatro temporadas consecutivas en Segunda División, entre el curso 1980-81 y el 1983-84.

El Elche ganó sus cuatro partidos de Liga en el Martínez Valero, pero en el campo del conjunto jienense sufrió dos derrotas (1-0 y 1-0) y sólo pudo rascar dos empates (0-0 y 2-2).

No ha tenido suerte el Deportivo Eldense, al que le ha tocado en suerte una eliminatoria ante el Málaga, uno de los históricos de Primera Federación. La nota positiva es el escenario, ya que La Rosaleda es un campo espectacular y en perfectas condiciones para competir.

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Ambos conjuntos tampoco se han visto la cara nunca en la Copa del Rey. En teoría, el Eldense, en plena racha de juego y resultados, debería hacer valer su condición de equipo de superior categoría, pero se enfrenta a un rival diseñado para ascender a Segunda que, además, cuenta con el apoyo de su afición, deseosa de revivir grandes noches de fútbol en su estadio.