Final de mercado, de momento. Elche, Hércules y Eldense aprovecharon el último día del plazo de fichajes para reformar y completar sus plantillas, respectivamente, aunque las tres entidades se guardan en la recámara la bala de los jugadores en paro.

El Elche llegó al último día con bastantes más urgencias como consecuencia del mal inicio del curso y del frenesí vendedor de las últimas semanas, en las que la entidad hizo caja tras desprenderse de Ponce, Pere Milla y Lucas Boyé, su tridente goleador.

Las ventas dejaron las arcas llenas, casi 13 millones de euros entre todas las operaciones, pero la respuesta inversora del máximo accionista, Christian Bragarnik, no ha sido ni de lejos proporcional a lo recaudado. El mercado franjiverde deja muchas sombras y puestos vacíos pese a las demandas del técnico, Sebastián Beccacece, al que habrá que creer cuando deslizó que el Elche ya no tiene una de las mejores plantilla de la categoría, por lo que debe reajustar sus objetivos.

Es evidente que el Elche ha perdido potencia de fuego en el área rival, al menos en teoría. La llegada de un viejo ídolo, Sergio León, de 34 años, y de Borja Garcés, joven delantero que ha ido encadenando cesiones en los últimos años, no hacen olvidar a los que se han ido –más de la mitad de los goles del pasado curso entre las tres ventas- y ponen en entredicho que la contundencia de la apuesta de club por lograr el ascenso.

El tercer fichaje del día fue Sergio Carreira, lateral del Celta de Vigo que llega al club cedido con una opción de compra. Otro jugador que ha enlazado dos cesiones en las dos últimas temporadas en el Mirandés y en el Villarreal B a la espera de explotar en el Martínez Valero. El gallego, un buen complemento, aumentará la competencia con Josan, pero está lejos, a priori, de lo que podía ofrecer el valencianista Fran Pérez, el deseado por el cuerpo técnico.

Quedan dos fichas libres y un vacío en el centro del campo, posición que el entrenador quería reforzar tras la baja de John Chetauya, y en la delantera, donde se echa de menos otro atacante de jerarquía que pueda discutirle la titularidad a Sergio León.

El Hércules cierra el círculo

El equipo alicantino llegó al último día del mercado con dos necesidades que cubrir y logró cumplir el objetivo, aunque los elegidos no sean las primeras opciones.

El cuerpo técnico ha completado el ataque con el madrileño Diego Lorenzo, que en las dos últimas temporadas militó en el filial del Rayo Vallecano, por lo que se trata de un jugador conocido por Javier Portillo, miembro de la secretaría técnica de la entidad madrileña.

El nuevo atacante del Hércules se formó en la cantera del Atlético de Madrid y en el pasado curso anotó nueve tantos con el filial rayista en la Tercera División madrileña.

También era necesario doblar el puesto de lateral izquierdo con un jugador sub 23 y finalmente el elegido fue Hugo Sanz, que llega cedido por parte del Real Murcia. El jugador, de 21 años, se formó en la cantera del Celta de Vigo, si bien en las dos últimas temporadas militó en el Ourense.

Retoques para el Eldense

También el equipo azulgrana, que está protagonizando un gran arranque de temporada en su regreso a Segunda, rentabilizó las últimas horas del mercado para dar el toque final a su plantilla. El club azulgrana incorporó al portero Álvaro Acerves, que procede del Valladolid y es internacional sub 21, y con el lateral Miguelón Llambrich, ex del Espanyol y formado en la cantera del Villarreal.