Amable, cercano e ilusionado. Sebastián Beccacece ha llegado al vestuario del Elche repleto de energía y entusiasmo a pesar de heredar una situación deportiva muy complicada. El argentino es consciente de que el descenso a Segunda es prácticamente un hecho, por lo que quiere aprovechar las 12 jornadas que restan para el final como un "desafío y una oportunidad" para comenzar a conocer el club, la plantilla y el entorno y poner los cimientos del próximo proyecto en Segunda.

"Lo que íbamos a conocer en junio lo haremos ahora", afirma el rosarino, presentado este jueves a los medios de comunicación. De su boca no salió en ningún momento la palabra "permanencia", pero no ocultó la crítica situación del equipo, colista a 14 puntos de la salvación. "Conocemos la situación y vamos a trabajar duro para salir de ella", indicó el argentino, que se marca como primera misión recuperar la "confianza y credibilidad" de los jugadores.

"No hace mucho consiguieron dos permanencias en Primera", recuerda Beccacece, que se definió como un entrenador comprometido con la institución y su ciudad, a la que calificó tras dos días en ella como "humilde, apasionada y comprometida". "Vengo de Rosario, donde también se vive de esa manera. Trataremos de desarrollar una idea que nos represente y con la que la gente se sienta representada", agregó el entrenador, quien llega al club acompañado de su habitual guardia pretoriana.

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El preparador aseguró que ha encontrado una plantilla con una actitud "notable" y con deseo de "absorber al máximo cada concepto con predisposición al esfuerzo".

 En cuanto a la realidad de la competición, Beccacece se abonó al clásico "partido a partido". "Quiero un equipo versátil, que esté preparado para todo en cada momento", dijo el entrenador, quien se alejó de un único modelo de juego y se mostró abierto a trabajar con diferentes sistemas.

"Hay que trabajar, ser insistente y rebelarse ante la adversidad. Y que eso nos permita  pelear hasta el último momento, pero cada cosa necesita su tiempo y su forma", argumentó Beccacece, quien añadió que "la calma y la tranquilidad van a ser fundamentales para el desarrollo" de su proyecto.

El rosarino se definió como un entrenador "cercano al futbolista" al que le gusta formar "grupos fuertes" y pidió a la afición del Elche, a la que agradeció su recibimiento, que siga apoyando al equipo. "El fútbol tiene esto, momentos lindos y otros dolorosos, pero ellos siempre están. Han mostrado lealtad y que lo sigan haciendo porque es de mucha ayuda", aseguró el preparador, quien se mostró convencido de su adaptación al fútbol europeo en su primera experiencia lejos de Sudamérica.

"He aprendido que el fútbol es universal y que más allá de las características de las competiciones o los equipos hay patrones que se repiten. Afrontamos esta etapa con naturalidad, como si estuviéramos en casa", sentenció.

Beccacece no ha parado desde su llegada a Elche y este viernes ya ha programado su primera sesión doble de trabajo con el objetivo de recabar toda la información posible para preparar la primera batalla ante el Barcelona.