Era algo deseado y esperado por todas las partes, pero en el mundo del fútbol nunca se sabe. Por eso el anuncio de la continuidad de Francisco en el banquillo del Elche provocó una ola de reacciones positivas, acompañada de una gran sensación de tranquilidad en el entorno franjiverde. El proyecto del próximo curso, el del centenario, está en buenas manos.

 “Teníamos ganas de que llegara este momento. Estoy ilusionado por jugar mañana y por lo que nos viene en unos meses. He dado las gracias a los jugadores porque sin ellos no hubiera sido posible continuar”, ha comentado este sábado Francisco, quien ha devuelto los elogios que le dedicó el propietario, Christian Bragarnik, tras anunciar este pasado viernes su esperada renovación.

“Es algo recíproco. Nos ha dado confianza. Nos transmitió que iba a estar a nuestro lado en los momentos duros y así ha sido. No tenemos una comunicación continua, pero es sincera”, relata el almeriense, quien añade que, pese a las apariencias, el argentino no es una persona lejana.

“Busca lo mejor para el Elche. No trabaja para él, sino para el club. Tiene la misma hambre que yo por hacer crecer al Elche. Se dedica a este negocio y sabe que los pasos no son fáciles”, añade el técnico, quien confiesa que el club lleva tiempo planificando el próximo curso.

“Hace un mes estábamos a ocho puntos del descenso y eso te hace adelantar cosas. Ya hay un trabajo hecho y ahora toca formalizarlo y planificar la pretemporada, que la tenemos encauzada”, detalla Francisco, quien está confiado “porque hay tiempo para hacer las cosas bien”.

El almeriense advierte, sin embargo, que no será fácil tener cerrada la plantilla “hasta bien entrada la pretemporada”. “Hay jugadores que queremos que sigan y si no, que venga gente con hambre y proyección”, explica el entrenador, quien confía en construir “un proyecto ilusionante partiendo de la base de ser humildes, pero sin dejar de crecer”.

El entrenador destacó la importancia de contar en la plantilla con una base de jugadores consolidados en el club, como Gonzalo Verdú, Josan o Fidel, entre otros, y no descarta la continuidad del argentino Javier Pastore. “Le ha costado coger el ritmo y cuando mejor está es ahora”, señala.

Fin de fiesta

El equipo bajará este domingo el telón de la temporada ante el Getafe en un duelo intrascendente a efectos clasificatorios, pero de enorme valor sentimental para el equipo y su afición, ya que además de despedir una exitosa temporada también será el último día como franjiverde de varios jugadores.

El equipo ilicitano, salvado del descenso desde hace dos jornadas, solo ha sido capaz de sumar un punto de los últimos 12, por lo que el técnico no quiere empañar con un mal final una gran segunda vuelta.  “Se lo hemos dejado muy claro a los jugadores. Merecemos irnos con una victoria y contentos ante nuestra gente”, afirma el almeriense, quien alerta de que la hora del encuentro, las 17:30 horas, no favorecerá el espectáculo.

“Es posible que pasemos por el calor un mal rato, sobre todo cuando el campo se seque”, avisa Francisco, quien reitera en que ante el Getafe es “el día de ganar y sumar los 42 puntos”, lo que supondría el récord histórico de la entidad en Primera. El entrenador se suma al llamamiento de la propiedad y pide a los aficionados que acudan al estadio para despedir la temporada y disfrutar de la permanencia. “Es el momento de sumar y de enganchar a la gente más joven”, finaliza.

Para este partido, el técnico no puede contar con los lesionados Gonzalo Verdú, Johan Mojica y Lucas Boyé, ni con Marcone, sancionado. Francisco dará minutos a varios jugadores que apenas han gozado de minutos durante la temporada, como Guido Carrillo, Lucas Olaza, el canterano John Chetauya o el portero Kiko Casilla, que repetirá en la portería por segunda jornada consecutiva.