Un post en el perfil de Facebook de la delegada del Consell en la provincia de Alicante, la socialista Antonia Moreno, ha agitado las redes sociales esta noche en el corazón de la Vega Baja. Entre otras cosas, porque acusa al valedor local de Cs (socio de gobierno de su partido desde la moción de censura en abril), el empresario José Alcántara, de insultarla públicamente con la connivencia de la alcaldesa socialista Carolina Gracia.

La delegada de Puig afirma que ha "meditado mucho si hacerlo o no y he decido contarlo", lo que sucedió en la pasada noche del lunes al martes "durante la fiesta de la pedanía de Correntías".

Textualmente afirma que "el empresario Alcántara, dueño de Ciudadanos Orihuela se dedicó a hablar mal de mí y a insultarme llamándome HDLGP. Iba bebido, o algo más, según me dicen. Allí yo no estaba".

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Antonia Moreno que fue portavoz del PSOE de Orihuela y formó parte del Gobierno tripartito de izquierdas a principios de la década pasada, expone cómo "ocurrió en un grupo en el que están la alcaldesa Gracia y el vicealcalde de ciudadanos, José Aix, socios de gobierno. Al parecer me faltaron al respeto de una manera grave. Ninguno de ellos lo mandó callar, ni impidieron sus descalificaciones".

"Me he enterado porque una persona ajena a ellos sí salió en mi defensa, cosa que le agradezco profundamente y se produjo un pequeño altercado a cuenta de este bravucón", continuó. Y es que Carolina Gracia, la misma alcaldesa había arremetido contra el empresario en la anterior campaña electoral. Pero luego terminó pactando una moción de censura con sus afines.

Para concluir: "Que Alcántara y sus secuaces se vayan a una cena popular, se emborrachen, provoquen un altercado por insultarme llamándome HDLGP es sencillamente un síntoma que define en qué lado de la decencia estamos cada uno.En este pueblo nos conocemos todos".

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Y añade una advertencia a su compañera de partido y antigua delfín, Gracia: "Quiero creer que no siempre ganarán los malos y que en algún momento habrá esperanza para prescindir de este matonismo de barra. Y quiero dejarlo escrito para que todo el mundo sepa en manos de quién estamos. Y por si acaso...". Una declaración que hace presumir un enfrentamiento que ha sobrepasado los límites políticos a los personales.

Para concluir: "El empresario Alcántara ni me amedrentó en 2011 ni lo va a hacer nunca. Allá cada uno en qué lado de la historia se coloca, bajo qué alas se cobija, a quién le vende su alma, a sueldo de quién se pone y qué borracheras disculpa".