Agosto de 2022, uno de los veranos más calurosos de los últimos años, y Mutxamel se acaba de quedar sin piscina, una de las pocas zonas municipales de baño que quedan abiertas en la provincia de Alicante. ¿El motivo? La oleada de "casos de incivismo" que ha sufrido en primera persona el personal de las instalaciones. 

"La piscina municipal se ha cerrado para ser usada como baño libre debido a los constantes casos de incivismo de usuarios que acudían y no cumplían las normas", explica en un comunicado el alcalde de la localidad, Sebastián Cañadas (PP). Eso sí, las actividades acuáticas de la Escuela Municipal de Deportes siguen celebrándose como hasta el momento. 

El primer edil justifica así la decisión del gobierno de limitar el uso de la piscina municipal, donde en las últimas semanas se han producido varios incidentes que han obligado a las autoridades a personarse en la zona. "Cuando se les recriminaba su actitud por parte de los funcionarios, se les amenazaba produciéndose situaciones en donde, en muchas ocasiones, ha tenido que intervenir la Policía Local y la Guardia Civil". 

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Por "seguridad"

Sebastián Cañadas reconoce que ha sido "una decisión difícil" de tomar, pero que lo han hecho para "preservar la seguridad de los trabajadores y de los propios vecinos y usuarios de la piscina", describe. En el mismo comunicado, el primer edil deja claro que aunque no se pueda usar como baño libre, "continúan las actividades acuáticas de la Escuela Municipal de Deportes".

"Lo sentimos mucho, pero llegó un momento tan crítico en el que tuvimos que tomar esa decisión para solucionar un problema de seguridad ciudadana", reconoce. Además, "lamentamos los partidos de la oposición que han salido criticando esta decisión en lugar de apoyarla para defender los derechos de los trabajadores públicos municipales y de los propios vecinos y vecinas de Mutxamel". 

Amenazas de muerte

La decisión ha sido duramente criticada por otros partidos políticos como Vox, desde donde plantean como solución la continua presencia policial en las instalaciones. Sin embargo, otras fuentes del Ayuntamiento muchamelero sostienen que esa no es una solución viable, ya que "no ven recomendable tomar el sol con un segurata al lado". Además, las mismas fuentes reconocen que ante la falta de piscinas municipales en Alicante, "pocos de los bañistas eran del municipio". 

El concejal de Vox de Mutxamel, Miguel Da Silva Ortega, se personó en las instalaciones de la piscina para entrevistar a los empleados, quiénes reconocieron haber sido víctimas de agresiones y amenazas. "Energúmenos de localidades vecinas y del propio municipio que vienen a bañarse, eso sí, sin respetar la normativa existente para el baño. Ante las amenazas de muerte, amenazas de dañar sus vehículos, insultos... están atemorizados hasta el punto de no querer ir a trabajar", afirman en declaraciones a los medios. 

¿Verano de 2023?

Con cada vez más piscinas cerradas y las playas abarrotadas de gente, otros bañistas se preguntan si la piscina de Mutxamel volverá a abrir al público el año que viene. Sin embargo, desde el Ayuntamiento reconocen no haber tomado todavía una solución. "Todavía es pronto", explican las mismas fuentes.