De nuevo, el presidente de la Comunidad Valenciana, el socialista Ximo Puig, ha aprovechado este fin de semana para arremeter contra su homóloga madrileña, Isabel Díaz Ayuso (PP), con quien parece librar una permanente confrontación tanto desde la perspectiva económica como desde la sanitaria.

Fue en el congreso autonómico socialista de la islas Baleares, donde participó en un encuentro con el exministro de Sanidad y líder socialismo catalán, Salvador Illa. Puig, aprovechó su participación en el congreso para contraponer su gestión a la de Ayuso.

"Mientras en las Islas y la Comunidad Valenciana la pérdida [de esperanza de vida] ha sido de 20 meses, en la Comunidad de Madrid ha sido de 2,7 años", comparó Puig. "Se puede decir que hemos hecho todo lo posible por la vida de las personas y otros han elegido otro camino", aseguró el presidente valenciano.

El presidente valenciano alabó la "apuesta de futuro" de lo que él entiende como los gobiernos progresistas tras "la nada" de los ejecutivos del PP en la anterior crisis económica. El escudo social impuesto por Pedro Sánchez que puso fin a una "época nefasta" de recortes como la respuesta de la izquierda a una crisis económica y sanitaria que valoró "peor" que la crisis financiera de 2008.

Madrileñofobia

Y es que el jefe del Consell lleva desde el inicio de su mandato criticando las políticas económicas madrileñas para justificar sus reivindicaciones de más financiación la Comunidad Valenciana. En 2020 aseguró que la Comunidad de Madrid ejerce una competencia desleal bajando impuestos para atraer inversiones, lo que denominó 'dumping fiscal'.

Hasta el punto, que obviando el régimen foral de vascos y navarros, este verano llegó incluso a solicitar que se gravase a los madrileños con un "impuesto" especial.  Un mecanismo de compensación que en su opinión debía introducir el Gobierno de Pedro Sánchez para que Madrid repartiese "con todos" su "plus de riqueza". La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, no tardó en rechazar la propuesta.

Entre tanto, desde el PP valenciano, su presidente Carlos Mazón, respondió en defensa de Ayuso que la Comunidad Valenciana sufre "un infierno fiscal". Y en materia sanitaria comparó los datos de la Comunidad de Madrid con los de otras autonomías gobernadas por socialistas con peores datos epidemiológicos.

En plena conferencia de presidentes autonómicos, en julio, el presidente valenciano volvió a la carga: Puig abogó por la "solidaridad" interterritorial mandando un claro mensaje a Ayuso y a la Comunidad de Madrid, de las que dijo "no pueden estar mirándose el ombligo permanentemente".

En una entrevista para EL ESPAÑOL, volvió sobre el asunto asegurando que "Madrid funciona como una aspiradora" y que "genera una macrocefalia que es negativa para España". Y resumió: "Nosotros estamos en campaña contra un sistema que es negativo para España. Un sistema que disocia, que es disolvente, que es la falta de equidad, la falta de igualdad".