EL ESPAÑOL de Castilla y León les informaba, el pasado sábado 4 de mayo, de la intervención de una granja de ovejas, presuntamente ilegal, en la localidad vallisoletana de Renedo de Esgueva tras una, en principio, denuncia del partido animalista Pacma. Todo por un presunto delito de abandono y maltrato animal.

Ante estas informaciones, el Ayuntamiento de Renedo ha querido salir al paso, tras la polémica, para dar su versión de ocurrido emitiendo un comunicado recogido por este periódico para afirmar que “no se ha intervenido explotación de ganado ovino alguno en este municipio como consecuencia de denuncia de Pacma por un presunto maltrato animal”.

Añaden, además, que las “múltiples y reiteradas denuncias por el estado y sanidad de los animales” en una de las explotaciones de la localidad las “ha realizado el Ayuntamiento de Renedo ante la Consejería de Agricultura y Ganadería de la Junta de Castilla y León, la comandancia de la Guardia Civil (Seprona), la Subdelegación de Gobierno en Valladolid y la Fiscalía provincial”.

Desde el Consistorio apuntan que el Juzgado de Instrucción Número 2 de Valladolid “se encuentra practicando diligencias” como consecuencia de “la denuncia presentada únicamente por el Ayuntamiento” y “las actuaciones practicadas por el Seprona de Valladolid por un presunto delito de maltrato animal” y remarcan que “sin que Pacma figure como denunciante ni personado en dicho procedimiento”.

“Ni el Ayuntamiento de Renedo, ni ningún otro de la Comunidad, ante la falta de control sanitario y deficiente sanidad de animales, no puede reubicar ovejas, sino que será la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural de la Junta de Castilla y León, a través de la Dirección General de Producción Agrícola y Ganadera y sus Servicios Territoriales los que deben adoptar medidas en esta materia que es de su exclusiva competencia”, apunta el comunicado.

El consistorio de la localidad vallisoletana asegura que desde el 2022 “ha puesto en conocimiento de la directora general de Producción Agrícola la grave situación sanitaria existente en una de las explotaciones de ganado ovino” con el fin de que “se adopten de forma urgente las medidas y actuaciones que en su marco competencial le asisten” para “evitar el sufrimiento y muerte de dichos animales, sin que se haya realizado actuación alguna por su parte para tal fin”.

El Ayuntamiento ha informado, además, que en el ejercicio de sus competencias “revocó todas las licencias, permisos y autorizaciones de dicha explotación” y que se “ordenó el cierre y traslado de la misma” y añadiendo que “se está tramitando actualmente ejecución forzosa del procedimiento administrativo”.

Además, el comunicado finaliza añadiendo que las actuaciones que se llevaron a cabo el 3 de mayo, se corresponden únicamente a “trámites administrativos en materia urbanística realizados por el Ayuntamiento y la Diputación de Valladolid” en “el inmueble donde se encuentran dichos animales y no a denuncia alguna de Pacma”.