El presidente de la Generalitat de Cataluña, Pere Aragonès, aseguró este sábado que la amnistía a los dirigentes independentistas catalanes procesados que ha planteado el jefe del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, era "un paso imprescindible y necesario" y que "lo que toca ahora es seguir trabajando para un referéndum".

"El candidato socialista a la presidencia del Gobierno, Pedro Sánchez, se ha posicionado sobre la amnistía. Era un paso imprescindible y necesario para avanzar en la resolución del conflicto político, y lo que toca ahora, una vez confirmada la amnistía, es seguir trabajando en la resolución del conflicto, que desde nuestro punto de vista solo pueda pasa por el referéndum", destacó.

Aragonés hizo estas declaraciones en Valencia, donde clausuró el acto de entrega de los 52 Premios Octubre, que organiza la editorial Tres i Quatre. Joan Baldoví, portavoz de Compromís, participó en el evento, al que también asistieron destacados dirigentes nacionalistas valencianos.

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Preguntado por las declaraciones formuladas por dirigentes del PP valenciano que han acusado a ERC de condicionar la investidura a la paralización de la ampliación del puerto de Valencia, Aragonès se limitó a reiterar que los "términos" que su partido puso sobre la mesa para la investidura son amnistía, referéndum, cercanías y fin del déficit fiscal.

En referencia al cambio de modelo de financiación y si será también una condición para la investidura, el presidente catalán respondió que "el déficit fiscal ahoga a la ciudadanía de Cataluña, del País Valenciano y de las Islas Baleares, que sea cual sea el color de su Gobierno, reciben menos fondos de los que le corresponden".

Además, Aragonès avanzó que "el catalán ha de estar presente en todos los sitios: escuelas, universidades, escenarios, pantallas, bibliotecas... y también en los lugares de poder democrático, en todos los parlamentos catalanes, del Estado, y bien pronto en el Parlamento Europeo y la Comisión".

"Hace 300 años que perdimos unas libertades que hemos recuperado parcialmente y seguimos aquí. Es un día para reivindicar nuestra lengua y nuestra cultura ante quienes intentan acabar con ella, reducirla a un reducto folclórico y convertirla en accesoria e imprescindible", dijó el presidente catalán.