Mañana jueves, Augas de Galicia decidirá qué hacer con las válvulas deterioradas de la presa de Eiras para solventar el problema que desde hace una semana se ha dado a conocer y que ha supuesto una nueva polémica entre Xunta y Concello de Vigo.
Según fuentes autonómicas que recoge Europa Press, tras una inspección visual de la instalación, se ha podido comprobar que lo que era un pequeño poro en una de las dos válvulas afectadas se ha convertido en un pequeño chorro y han insistido en que "no se trata de un problema que se pueda solucionar con la colocación de válvulas provisionales de 50.000 euros", como defendía el alcalde, Abel Caballero.
Por tanto, mañana tomarán "la decisión definitiva para la actuación a cometer en la presa, con las consecuencias que pueda acarrear de cara al futuro".
Esta última incidencia ha sido comunicada a Aqualia, concesionaria municipal del agua en Vigo, "para que lo tenga en cuenta", ya que es la empresa encargada de manipular esas válvulas y el empeoramiento de los daños puede "limitar" esa operatividad.
Deterioro de las válvulas de la presa de Eiras, que suministra a Vigo y a varios municipios del área.
