La Guardia Civil de Ourense interceptó al conductor de un autobús escolar que había consumido drogas. Concretamente, arrojó un resultado positivo en cocaína y benzodiacepinas en el momento en el que trasladaba a tres escolares con edades comprendidas entre los siete y los 12 años de edad.
Todo ocurrió el pasado 14 de noviembre, coincidiendo con el inicio de la campaña de control sobre el transporte escolar que, en la provincia ourensana, está desarrollando el Subsector de Tráfico. En uno de los controles se detectó, en palabras del Instituto Armado, "un resultado poco usual".
El laboratorio homologado a efectos de contraste, corroboró posteriormente dicho resultado, por lo que el conductor se deberá enfrentar al menos a una sanción administrativa de 1000 euros y la detracción de 6 puntos de su permiso de conducción.
Desde el propio Subsector de Tráfico, la Guardia Civil advierte que dichas conductas son "casos aislados y puntuales" y que el transporte escolar sigue siendo, a día de hoy, uno de los medios de transporte más seguros. No obstante, anotan, y para contribuir a que dicha seguridad siga en aumento, se desarrollarán controles específicos en el ámbito escolar durante todo el curso académico.
