La quinta edición del 'Mes sin tabaco' lo tiene claro: el cigarrillo electrónico es una alternativa más para ayudar a detener el consumo de tabaco. De hecho, según Cochrane, empresa que realiza revisiones sistemáticas de estudios de investigación primarios en política y atención sanitaria en humanos, llegó a la conclusión de que son más eficaces que los parches y los chicles. 

La iniciativa 'Mes sin tabaco' ha sido puesta en marcha por el Servicio de Sanidad Pública francés y, en su celebración, afronta como un “desafío colectivo” el abandono del tabaquismo durante 30 días con la finalidad de suprimir por completo el hábito entre los fumadores.

Tal y como se especifica en su página web: la apuesta por el cigarrillo electrónico que realizan las entidades públicas en Francia viene avalada por multitud de investigaciones científicas. “El cigarrillo electrónico se considera menos perjudicial que el tabaco debido a la ausencia de productos de combustión y monóxido de carbono que provocan o favorecen la aparición del cáncer. Es por ello que, cuando vapeas, el riesgo de desarrollar enfermedades graves disminuye”.

Con más de 780.000 usuarios registrados desde su creación en 2016, el 'Mes Sin Tabaco' se basa en dos pilares para conseguir sus objetivos: preparación y apoyo. Según un estudio de Public Health France, el 16% de los fumadores que participaron en la primera edición intentaron dejar de fumar durante el último trimestre de ese año. Entre ellos, más del 18% lo atribuía a esta campaña y, un año después, entre el 6 y el 10% no había vuelto a fumar. 

En palabras de Olivier Smadja, coordinador de la iniciativa, “este 6% obtenido es una cifra destacable, ya que consideramos que cada año un 3% de las personas que dejan de fumar sin acompañamiento abandona el tabaco. Por lo tanto, podemos asegurar que al participar en el #MesSinTabaco, duplicamos nuestras posibilidades de dejar de fumar”.

Las primeras observaciones realizadas por el propio Public Health France concluyen que el confinamiento domiciliario originado por la crisis sanitaria de la Covid-19 ha propiciado un aumento en el consumo de tabaco en Francia. La incorporación del cigarrillo electrónico a la estrategia definida por el 'Mes Sin Tabaco' forma parte del esfuerzo que las autoridades públicas del país vecino realizan para dejar de fumar.

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