El partido ante el Girona ha dejado secuelas en el Betis. En el tramo final, acusó la lesión del Chimy Ávila. Tras la realización de pruebas, el club ha confirmado que sufre una lesión miotendinosa proximal del isquiotibial izquierdo. Difícilmente podrá jugar antes del final de temporada.

Se trata del mismo percance que sufrió Isco y que le ha tenido fuera de los terrenos de juego un mes y medio. El malagueño aceleró la recuperación para estar disponible en seis semanas. No obstante, los plazos de esta dolencia pueden alargarse hasta los dos meses.

LaLiga finaliza el 26 de mayo. Así, en el mejor de los casos, solo podría estar disponible para algunos minutos en los últimos partidos. Prácticamente, se quedará sin jugar lo que resta de temporada.

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Las lesiones han sido una constante en los últimos años de carrera del argentino. Con Osasuna sufrió dos roturas de ligamento cruzado, una en la 2019-2020 y otra en la 2020-2021. Justo antes de llegar al Betis, estuvo un mes parado por una lesión en la pantorrilla.

Chimy Ávila salió en el minuto 62 del partido ante el Girona y cayó lesionado en el 83', cuando tuvo que ser sustituido por Rodri. Solo ha podido jugar seis partidos con el Betis. También se perdió el duelo ante el Rayo tras ser expulsado ante Osasuna.

Sin suerte con los fichajes de invierno

El Betis no ha tenido demasiada suerte con los fichajes de invierno del curso 2023-2024. Cedric Bakambu solo ha jugado 24 minutos en LaLiga y 45 en Conference League.

Llegó cuando estaba disputando la Copa África con República Democrática del Congo. Por ello se perdió dos encuentros.

Solo jugó ante el Alavés y en la vuelta ante el Dinamo de Zagreb. Marcó un gol y se retiró en la segunda parte por una rotura en el sóleo. Se ha perdido cinco partidos. Su vuelta se espera para el siguiente encuentro ante el Celta de Vigo.

Al menos Pablo Fornals y Johny Cardoso, los otros dos fichajes de invierno, no han tenido problemas físicos en una temporada donde las lesiones han sido una tónica constante para el Betis.