Tanto la Guardia Civil como el Gobierno sostienen a estas horas que el accidente mortal de Los Palacios donde perdieron la vida seis personas al verse arrolladas por un camión, fue un accidente. Y, sin embargo, el conductor del vehículo de transporte está en prisión preventiva sin fianza. ¿Por qué?

Las razones, como ya apuntó EL ESPAÑOL, son varias. En todo caso, fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) apuntan a tres, principalmente: la posible destrucción de pruebas; el riesgo de fuga; y la gravedad de las penas a las que se enfrenta el conductor. 

Argumenta el tribunal que le ha mandado a prisión que, para tomar la decisión de que un sospechoso vaya a la cárcel, puede asentarse en que las penas a las que se arriesga superen el ingreso en prisión. Esto es, de forma general, dos años. 

[Dos de los civiles muertos en el accidente de Los Palacios tenían antecedentes por drogas]

En este caso, señalan las mismas fuentes, el detenido se enfrenta a seis delitos de homicidio imprudente. Cada uno de ellos, en su máxima pena, supera esos dos años y, por lo tanto, supondría el ingreso en prisión. 

Confesó los hechos

Pero, además, argumenta el juez, para mandar a prisión a un detenido hay que tener la certeza de que ha sido el autor de los hechos que se le imputan. En este caso no hay duda porque el mismo conductor del camión reconoció los hechos y confesó. 

Por último, el tribunal maneja dos variables para mandar a prisión al conductor del camión: el riesgo de fuga y el de destrucción de pruebas que luego puedan usarse en el juicio contra él. 

En el caso del riesgo de fuga, señalan en el TSJA, "el Juzgado considera que la pena que se le podría imponer, de elevada graduación incluso en su límite mínimo permite dudar que la puesta en libertad del detenido con medidas alternativas a la prisión garantizasen la presencia del mismo durante todo el procedimiento”.

Muchos años de prisión

Es decir, temen que se fugue ante el elevado número de años de prisión a los que puede ser considerado incluso si se le aplica la pena más baja para cada uno de los delitos que se le atribuyen al conductor. 

Añade el juez que “ninguna otra medida de aseguramiento evitará el riesgo de fuga” salvo la prisión preventiva, de modo que la retirada del pasaporte, la imposición de comparecencias apud acta o la fijación de una fianza “no ofrecen la garantía suficiente de la presencia de los investigados en la instrucción y en el acto del juicio”. 

Destrucción de pruebas

En cuanto a la destrucción de pruebas, el juez señala que "existen aún múltiples diligencias a practicar por la Policía Judicial a efectos de investigar el hecho delictivo y las causas del mismo".

La investigación, por tanto, necesita de las pesquisas de los agentes de la Guardia Civil y, con el acusado en libertad, podrían comprometerse algunas de las evidencias, señala el juez.

El conductor del camión, añade, “podría eliminar dichas fuentes de prueba en una fase tan incipiente de la investigación” si estuviese en libertad.