Brigada Guzmán El Bueno X, del Ejército de Tierra, con Cerro Muriano.

Brigada Guzmán El Bueno X, del Ejército de Tierra, con Cerro Muriano. Ejército de Tierra

Sevilla

El capitán imputado por la muerte de dos soldados en Córdoba quitó peso a los reclutas, según su entorno

El mando está señalado por el ahogamiento de dos militares así como otros dos altos cargos del Ejército.

19 enero, 2024 16:48
Sevilla

Fuentes cercanas al capitán ya señalado oficialmente por el Juzgado militar de Sevilla aseguran que el mando habría ordenado a los soldados a sus órdenes que quitaran peso de su equipo antes de entrar al agua. 

La declaración es clave porque el peso de las mochilas de los soldados es uno de los puntos que señala el magistrado militar para imputar al capitán y a otros dos mandos por las muertes ocurridas en unas maniobras en Cerro Muriano (Córdoba).

Según desvela El Día, esta versión de fuentes cercanas al capitán sería justo la contraria a la dada por la defensa que representa a las familias de los dos soldados muertos, Carlos León y Miguel Ángel Jiménez.

[El capitán se negó al principio a rescatar a los soldados que se ahogaban, según el abogado del recluta muerto]

Además, este relato de los hechos contradice al juez, que ha señalado que hay indicios para creer que los soldados no tenían una línea de vida, que sus mochilas no eran estanco y, por lo tanto, no podían servir para flotar y que, por último, llevaban demasiado peso, en algunos casos como castigo. 

Según El Día, el capitán dio a sus soldados permiso para no tener que llevar los chalecos que les protegen de la metralla así como cierto armamento. De esta forma, llevarían menos peso que el habitual, no más, como señala la defensa de los soldados muertos. 

Mochila estanco

Además, según la misma versión cercana al capitán imputado, la ropa de abrigo de los soldados iba dentro de la mochila que, aseguran, sí era estanco. 

Sin embargo, no es lo que aprecia el juez, que habla justo en su escrito de las mochilas, de las que dice que tiene sospechas de que fueran estanco. ¿Por qué eso es clave? 

Porque unas mochilas estanco habrían servido de flotador a los soldados cuando perdieron pie y podría haber salvado la vida de los dos reclutas muertos. 

Según el relato cercano al capitán, en el lago donde se hizo la maniobra había más instructores de lo habitual. Y los había en las dos orillas: de la que salieron los soldados y a la que debían haber llegado. 

Tres imputados

Este viernes el Juzgado militar de Sevilla ha imputado al capitán en cuestión y dos mandos más por las muertes. 

En concreto, el juez se basaría en la ausencia de "línea de vida", sistema de seguridad para que los reclutas cruzaran el lago con seguridad; al uso de las mochilas que no eran estanco y, por lo tanto, no flotaban; y al hecho de que algunos de los soldados llevaban un peso extra como castigo de más de tres kilos.

Según el escrito del juez, os imputados podrían haber incurrido en un delito contra la eficacia del servicio, que se produce cuando el militar incumple sus deberes fundamentales causando "grave daño en los medios o recursos de las Fuerzas Armadas o en las personas, o riesgo para el servicio o para la seguridad de una fuerza, unidad o establecimiento de las Fuerzas Armadas".