El aprendizaje de un músico se cultiva en la escuela, en el conservatorio, en las muchas horas de dedicación a un instrumento, en los ensayos y en las actuaciones. Cualquier escenario es válido para mejorar y comprobar los progresos. Y uno tan provechoso como las salas de conciertos o los grandes recintos es la calle.
Ante la sorpresa del público que viene y va y su juicio rápido en unos pocos minutos, los músicos callejeros comparten su música con espontaneidad y la esencia de la creación artística se advierte cercana y auténtica. Así la experimentan los integrantes de un cuarteto de cuerda coruñés que hace nueve años estrenó la calle como informal pero valioso escenario: Grupo Fua.
Hoy, 22 de noviembre, es el Día del Músico. Jorge, Javier, Pablo y Daniel, que al menos una vez cada semana ensayan juntos, lo celebran manifestando su entrega, sacrificio y placer a la música; un trabajo que, a través de su cuarteto, es una reivindicación diaria.
En dos de ellos la música está en sus familias, otros dos la descubrieron sin que sus padres o abuelos se hubieran dedicado antes a un instrumento. El padre de Jorge Galán (violín, 32 años) es profesor en el Conservatorio y fue miembro de la Banda Municipal de Música. El abuelo de Javier Ucha (violín, 32 años) fue violinista y le dio clases antes de acceder también al Conservatorio. Allí, con 7 años, se conocieron Jorge y Javier.
Foto promocional de Grupo Fua.
En cambio, Pablo Quiroga (violista, 31 años) y Daniel Canosa (violonchelista, 44 años) no recibieron genética musical. Pablo escogió la viola a los 8 años y de la Escuela Municipal de Oleiros pasó al Conservatorio. Daniel, "el abuelo" del grupo, que daba clases cuando sus compañeros aprendían, fue apuntado con su hermana por su madre al Conservatorio y eligió el violonchelo "porque no había más opciones".
La música acercó y unió a estos cuatro artistas, quienes cuando ensayan cada semana no solo lo hacen para reforzar su compenetración musical, sino también "porque somos amigos y nos lo pasamos muy bien".
De la boda a la calle
En el verano de 2016 se lanzaron a la calle. Grupo Fua ya actuaba entonces en bodas y eventos. Al acabar su actuación en el cóctel de un enlace tenían tiempo y decidieron seguir tocando en una calle del centro de A Coruña. Ese fue su primer contacto callejero, que le sirvió para "darse a conocer" y para que a partir de ese momento "llegaran ofertas" para más bodas, para actos de empresas, tiendas, fiestas, "más numerosas en verano, más sueltas en invierno".
"En la calle nos definen las versiones de música moderna, que van de bandas sonoras de cine a pop, pero hacemos alguna pieza de música clásica, canciones de rock, música jazz, metal, flamenco, bachata...", repasan los miembros del cuarteto. "De Metallica a Michael Jackson, de Miley Cyrus a Rosalía".
El público reconoce los temas, las melodías. Se detiene un rato ante los músicos en la calle Real o junto al teatro Rosalía de A Coruña. En actos y bodas el repertorio suena de fondo, el público "está a otras cosas", pero en ocasiones Fua recibe alguna petición: "En Palexco unos sevillanos nos pidieron música de películas de Marvel, dijeron que éramos como una gramola".
Los cuatro músicos de Grupo Fua no conciben sus vidas sin la música, aunque cada uno la siente y la vive a su manera. Jorge reconoce que la música que le "acompaña a diario" es la de su propia formación. A Javier le ocurre lo mismo y en este momento de lo que más disfruta es de "arreglar y preparar" las canciones de su repertorio.
Una actuación de Grupo Fua.
Daniel, criado con la música de Silvio Rodríguez y gran admirador de Dream Theater, resalta que a Fua "le interesa más la calidad de un tema y lo que transmita que el género al que pertenece". Y Pablo, devoto de Shostakóvich, aprecia "el gusto que se le encuentra a canciones o música que crees que nunca escucharías". "Desde metal a flamenco o bachata, lo que sea si el tema está bien".
Ni hippies ni bohemios
Adaptar, arreglar, probar, ensayar, interpretar. Y mucho tiempo de dedicación. En el Día del Músico estos cuatro profesionales de A Coruña ensalzan su trabajo volcado en el arte; sea en la calle o en un salón.
"Valoramos la importancia que el músico da a la música". "El trabajo de una orquesta profesional suele estar muy valorado, pero hay otros trabajos musicales menos visibles y reconocidos que tienen mucha dedicación detrás a lo largo de la vida". "Nos ven tocar en la calle y pueden pensar que somos unos hippies o bohemios sin creer que nuestro trabajo es serio o digno. No vendemos bienes tangibles, nos dedicamos a aportar felicidad y eso no tiene precio".
Son frases de los miembros del cuarteto Grupo Fua que guardan la intensidad de su relación con la música: "Nos hace felices. Cualquier persona debería ser feliz con su trabajo. Nosotros hemos elegido este".
