En A Coruña no solo se come bien en las calles típicas del centro, como La Barrera, La Galera o La Franja, entre otras, sino que en sus barrios también se esconden restaurantes que son una maravilla gastronómica. Locales con productos de calidad y baratos en los que comer a reventar.
Uno de ellos es la conocida Bodega Órdenes, situada en el barrio del Agra do Orzán, concretamente en la calle Cuba. Una usuaria de TikTok ha compartido su experiencia en esta casa de comidas y, como bien dice al inicio de su vídeo, "solo podemos recomendarla".
"Raciones abundantes y llenas de sabor"
La propuesta gastronómica de este establecimiento se basa en productos de calidad, buena maña a la hora de cocinar y precios súper competitivos. Un grupo de 6 amigos acudió a Bodegas Órdenes sin saber que iban a irse encantados por el buen sabor de la comida y el trato recibido.
"El sábado fuimos a cenar a Bodega Órdenes y solo podemos recomendarla", comienza diciendo la usuaria de TikTok en su vídeo. Tres raciones y tres postres fueron más que suficientes para el grupo de amigos.
El primer plato que enseña es una ensaladilla, de la que afirma que "no esperábamos encontrarnos una ensaladilla así. [...] La llevaron a otro nivel con una yema frita", comenta mientras se ve en la imagen como el huevo se esparce por la ración.
Tras esto, llegó el turno de la ración de calamares que, a juzgar por la imagen, era bastante grande. "Era enorme y bien acompañada de patatas cocidas". Lo cierto es que la buena pinta del plato habla por sí sola.
Como tercera y última opción, optaron por un entrecot: "Lo pedimos al punto y es que estaba perfecto", afirma sin ningún tipo de duda. En este caso, hay opción de pedirlo más o menos hecho, en función de cómo te guste el punto de la carne.
Aunque no sale en el vídeo, no podemos dejar de mencionar una de las recetas estrella y más populares de Bodegas Órdenes: su brocheta de rape, pulpo y langostino, un absoluto manjar que enamora a todo aquel que la prueba. No obstante, es necesario encargarla con antelación.
Respecto a los postres, el grupo de amigos optó por pedir un mix variado: tarta de la abuela, tarta de chocolate blanco y orujo, y una tarta de queso. El precio de cada uno de ellos era de 4,50 euros, barato en comparación con otros restaurantes de la ciudad.
Las tres raciones y tres postres, junto con pan, una botella de agua y un par de cañas, le salió a este grupo de seis amigos por tan solo 70,20 euros. "Raciones abundantes y llenas de sabor", afirma en la descripción @itsprese.
