El buen tiempo animó a muchos a planificar sus vacaciones de Semana Santa fuera de casa. El sector hotelero celebraba hace dos semanas una previsión de ocupación del 80%. Sin embargo, a medida que se iba acercando la fecha y las nubes se aproximaban a la ciudad cerulina, las expectativas que se tenían para estas fechas fueron disminuyendo.
"Teníamos unas buenas perspectivas", confiesa Agustín Collazos, presidente de la Asociación Empresarial de Hospedaje de A Coruña (Hospeco) y director del Hotel Finisterre. Esperaban un 80% de ocupación en alojamientos del centro y un 70% en el extrarradio.
Collazos destacaba el crecimiento respecto al año pasado, motivado por unas fechas más cercanas al verano y por el buen tiempo que animaba a viajar. Sin embargo, la primavera hizo de las suyas y la lluvia irrumpió en la ciudad a pocos días de las vacaciones. La llegada de una borrasca sobre Galicia, hizo que muchos turistas se replantearan su destino.
"Las previsiones de mal tiempo están afectando mucho a la continuidad en las reservas. Teníamos muy buenas perspectivas, pero la demanda se ha paralizado e incluso ha habido algunas cancelaciones", señala el presidente de Hospeco.
Actualmente, se estima una ocupación del 75% en el centro, frente al 80% esperado hace apenas dos semanas. En los hoteles de las afueras, las previsiones bajan del 75% al 65%.
Por el momento, las expectativas para el puente de Semana Santa no son alentadoras. Se esperan lluvias durante toda la semana, incluidos los días clave: jueves, viernes, sábado y domingo. "Seguimos mirando al cielo, a ver si llega alguna buena noticia que anime a la gente en el último momento", concluye Collazos.