Un total de 5.563 tiendas, presencia en 214 mercados y en 170 nacionalidades. Este es el alcance del grupo Inditex a enero del 2025, 50 años después de la apertura de la primera tienda de Zara, que abrió en 1975 en el número 64-66 de la calle Juan Flórez de A Coruña.
Solo de esta marca existen en total 1.759 tiendas, 256 de ellas en España. Una repercusión que Ana María Velasco, periodista, historiadora y autora de Moda española: del Renacimiento a Zara condensa en una sola frase: "Zara es sinónimo de moda en España".
El origen de esta marca se remonta a los años 70, un momento en el que la moda en España, después del éxito en la década anterior de la Cooperativa de Alta Costura, se encontraba en un momento de crisis. El franquismo acababa de imponer un impuesto extraordinario al lujo, lo que perjudicó la competitividad de las casas españolas en el mercado internacional.
"Muchas firmas cierran las casas de alta costura y empiezan a reconvertirse en prêt-à-porter —ropa lista para llevar pero que es de diseñador—. Una de las razones que propicia el nacimiento de Zara es el desarrollo de la ropa de grandes almacenes, con prendas ya hechas y listas para llevar", explica Velasco. Unos años antes, en 1963, Amancio Ortega, que por entonces era dependiente en una tienda coruñesa, y Rosalía Mera, su primera mujer, fundaron Confecciones GOA, un taller de confección, junto al hermano y la cuñada de Ortega.
Imagen de la tienda de Zara en la calle Torreiro de A Coruña en 1975.
En este contexto, y coincidiendo con el inicio de la Transición tras 40 años de dictadura, nacía Zara.
Con la apertura en 1975 de esa primera tienda de Zara, las coruñesas y coruñeses pudieron acceder a prendas muy variadas, con diseños bonitos y, sobre todo, baratas. Los cajones que almacenaban la ropa en esta tienda ofrecían una variedad que no se encontraba en otras marcas de la ciudad. Como ejemplo, en aquella época algunos de los súper ventas eran las sudaderas o los chándales.
"Era una ropa bastante sencilla y para todo el mundo", añade Velasco sobre esas primeras prendas.
Con la apertura de esta tienda en A Coruña, "Zara cambió el ritmo". Así lo destaca Ignacio Cortina de la Escuela de Moda Goymar, que añade que "la gente empezó a comprar con otra lógica: más rápido, más a menudo, más por impulso".
Primeros pasos hacia la internacionalización
El gran paso hacia el crecimiento de la marca llegaría una década después. En 1985 se fundaba Inditex como empresa matriz de Zara, agrupando así todas las sociedades de Amancio Ortega.
Tres años después, en 1988, abría la primera tienda de Zara fuera de España, pero muy cerca de A Coruña, en Oporto. En los dos años siguientes, la expansión internacional llegaba a Nueva York y a París. Velasco señala este momento como clave, ya que "ahí ya se ve esa decidida apuesta internacional".
La primera tienda de Zara en Nueva York en los años 80.
La tienda neoyorkina recibía ya entonces, como recoge una noticia de The New York Times de la época, un envío de ropa desde España cada tres semanas y situó su tienda de dos pisos en una ubicación privilegiada: Lexington Avenue.
Dentro de esta expansión y con la creación de Inditex, Zara ya no es solo una tienda de ropa. "La decisión de expandirse como una multimarca es muy propio de un grupo de conglomerado de lujo", apunta Ana María Velasco, que señala otro aspecto clave: la compra o alquiler de locales en grandes edificios.
Una idea extendida es que Zara no publicita o promociona ni su marca ni su ropa. Aunque es cierto que en pocas ocasiones recurrió a anuncios tradicionales, la historiadora apunta a otra estrategia. "Todos los Zaras están en los locales más bonitos y en el centro de la ciudad, en la mejor calle. Dentro, hay una voluntad de una decoración no muy lujosa, pero sí moderna. Es una tienda accesible y esa es una campaña de marketing muy muy importante", explica, señalando que esa idea de "tienda que atrae e invita al consumidor" es su principal reclamo.
Precisamente, esta apuesta por la experiencia y la estética también ha marcado A Coruña. María Liste de la Escuela de Moda Formarte indica que "ese cuidado en lo estético ha dejado una huella en la ciudad, lo que algunos llaman 'efecto Inditex'".
Imagen del Zara de París abierto en 1990.
De esta forma, los últimos años de la década de los 80 suponen un giro en la estrategia de la compañía, que apuesta por "convertirse en una marca importante, en un referente de la moda española". Ya en el 2001, con su salida a Bolsa por un valor inicial de 9.000 millones de euros, Inditex consolida su alcance.
Esta evolución dejó huella en A Coruña donde, en palabras de Cortina, fue "un acelerador impresionante. A nivel local, trajo empleo, profesionalización y orgullo industrial".
La capacidad de adaptación es uno de los aspectos que más resaltan desde Formarte. "Su ritmo de reinvención es tan rápido que, de forma indirecta, genera una tendencia que muchas otras marcas, incluso pequeñas, intentan seguir. Esto les permite reinventarse constantemente", explica.
Innovación y polémicas en la producción
Un aspecto importante que explica el auge de Zara está en la decisión de controlar toda la cadena de fabricación de la ropa..
Velasco explica que "el control de todo el diseño, la fabricación, el proceso de distribución y que Zara solamente venda en tiendas Zara, es un elemento muy diferenciador". Las primeras prendas de esta compañía se fabricaban en Galicia y en Portugal, pero con el paso del tiempo se traspasaron a otros países como Marruecos, Italia y más adelante China o India. "Zara no ha hecho nada que no hagan todas las marcas", razona la historiadora.
El renovado Zara de Lisboa ha sido una de sus últimas aperturas.
Los altos costes y una infraestructura que no permite un ritmo alto en la renovación de prendas explican por qué el grueso de la producción de Inditex ya no se realiza en España.
Otro aspecto que ha marcado la trayectoria de Zara han sido las acusaciones de contaminación del medioambiente por su modelo de fast fashion en una de las industrias más contaminantes. Como medidas, en los últimos años la firma ha integrado la sostenibilidad como estrategia a través de la tecnología e innovación con objetivos como alcanzar el 100% de uso de fibras textiles de menor impacto para 2030.
El Zara del futuro
Resulta difícil predecir qué pasará con Zara en sus próximos 50 años. Sin embargo, en estos últimos tiempos sí se ha percibido un cambio de tendencia en la marca, que proyecta una imagen más cercana al lujo con colecciones cuidadas y exclusivas y con la inclusión de cafeterías en sus tiendas.
Una imagen de la nueva colección por el 50 aniversario de Zara.
Además de sus tiendas en las mejores localizaciones y con una decoración muy trabajada, en estos últimos años Zara se acerca, en palabras de María Liste, a "una moda más premium" con colaboraciones creativas con grandes nombres del mundo de la moda como Narciso Rodríguez, Steven Meisel, Kate Moss o Cindy Crawford y Kaia Gerber. Esto se complementa con "una imagen de marca muy cuidada y una página web que recuerda a una editorial de moda".
"Los consumidores ya no buscan un producto básico. Lo que ofrece Zara, sobre todo a las mujeres, son productos de alta moda a precios muy económicos", apunta Velasco. Una idea revolucionaria hace 50 años que ha influido en el mundo de la moda.
