El fútbol base de A Coruña ha vivido un revulsivo en los últimos días. La denuncia de una madre de una árbitra de 13 años que aseguró haber presenciado un episodio de acoso a su hija en los campos de la Torre ha corrido como la pólvora por redes y medios de la ciudad. El asunto ha llegado a escalar a la Real Federación Galega de Fútbol que ha convocado la Comisión para el Control de la Violencia del Fútbol Gallego con el fin de analizar lo ocurrido. A todo ello se suma que Raquel, la colegiada que protagonizó el tenso episodio, ha ampliado el acta arbitral y ha señalado a miembros del cuerpo técnico del Silva.
En la primera acta arbitral Raquel solo había señalado al delegado de campo del Victoria. Con todo, el ambiente de crispación que se vivió en los Campos de la Torre el pasado fin de semana fue peor de lo recogido en el documento. Ester, la madre de la colegiada, asegura que su hija no fue capaz de trasladar todo lo ocurrido por el estado de shock que vivió. Por ello, la delegación de árbitros de A Coruña le informó de que había una herramienta a su disposición para enmendar el error.
La ampliación de actas arbitrales en un instrumento que sirve para añadir información sobre incidentes registrados en el partido. Habitualmente se usan para trasladar intimidaciones o amenazas por parte de jugadores, afición o responsables de los equipos participantes en la competición. En este caso Raquel, según asegura su madre, ha aprovechado la ampliación del acta para señalar a varios miembros del cuerpo técnico del Silva, equipo que hasta el momento no había sido señalado en ningún documento oficial.
"Se han equivocado de niña. Yo voy a llegar hasta el final"
La ampliación del acta podría ser clave a la hora de determinar las sanciones que impondrá el Comité de Competición de la Real Federación Galega de Fútbol. La madre de Raquel, por su parte, reclama la retirada de la licencia federativa de todos los implicados. "Se han equivocado de niña. Yo voy a llegar hasta el final", dice contundente.
En esta línea, tanto los clubes como Futgal han emitido sendos comunicados manifestando su apoyo a Raquel y defendiendo los valores que deberían regir el fútbol base: el respeto y la deportividad. Unos adjetivos que, en cualquier caso, el pasado sábado brillaron por su ausencia.
Comunicado del Victoria
Ambos equipos han dado la cara públicamente. Pero el Victoria ha sido el primero en hacerlo. El club ha pedido disculpas por la actitud de su delegado y ha remarcado que "es una institución de más de ochenta años de historia". Por ello, la Directiva ha manifestado su "más firme repulsa a todos los actos que inciten, conlleven o conduzcan a la violencia en el fútbol".
El Victoria describe lo sucedido el 15 de febrero como un episodio en el que fueron "tristes protagonistas". A Raquel le han dedicado palabras de "apoyo" describiéndola como una profesional "valiente" que, pese a lo vivido, "al día siguiente volvió a pitar precisamente a uno de nuestros equipos, no dejándose amedrentar por lo ocurrido".
"Un hombre que ha tenido hasta la fecha una trayectoria intachable en el club y que no ha estado a la altura de la situación"
Sobre el papel de su equipo técnico en el partido, el club ha defendido que se trata de "un hombre que ha tenido hasta la fecha una trayectoria intachable en el club", pero que en este caso "no ha estado a la altura de la situación". Finalmente, terminan el documento con una pregunta al aire: "¿Qué mensaje estamos dando a los peques?, ¿estamos haciéndolo bien? no, nunca debería darse esta situación".
Comunicado del Silva
El Silva ha emitido un comunicado a última hora del martes en el que también trasladan su "apoyo" y "más sinceras disculpas" a Raquel. Hasta este momento el club había evitado dar hacer declaraciones al respecto de lo ocurrido puesto que aseguraban no tener constancia de lo sucedido, además de apuntar que en el acta no se señalaba a ningún miembro del club.
Con todo, dadas las acusaciones vertidas por parte de Ester, el club decidió abrir una investigación para esclarecer lo sucedido. Finalmente, pudo hablar con la familia de la afectada, así como con el Comité Técnico Galego de Árbitros y con el secretario general y el presidente de la RFG y con el Concello de A Coruña. "Más allá de eso, se inicia un proceso de investigación interna para conocer el fondo de lo sucedido", añaden.
"Existirán algunas que no tengan un comportamiento digno de portar este escudo y que deberán de ser desterradas, ya no solo de esta entidad, sino del deporte fútbol"
Actualmente el club está inmerso en la investigación y promete que "una vez resuelto el mismo, actuará con toda la firmeza que le proporcionan los diferentes reglamentos". A mayores, aclaran que "a fecha de redacción de este comunicado, esta entidad no cuenta con ningún video, ni ninguna ampliación del acta". Si bien aseguran que "esta entidad va a respetar y respaldar en todo momento lo que resuelvan los órganos disciplinarios y no va a presentar ningún recurso ni similar ante cualquier resolución del Comité de Competición".
El club termina el comunicado defendiendo que todo aquel que no cumpla con un "comportamiento digno" deberán ser "desterradas".