Miguel Ángel Lotina es otro deportivista adoptivo. Su paso por el Dépor se puede analizar ahora con mayor perspectiva y, a pesar de acabar ensombrecido por un descenso muy polémico y no por situaciones deportivas, y sin duda dejó un gran poso como la práctica totalidad de técnicos vascos, una cantera de entrenadores que en A Coruña casi siempre ha dado resultados exitosos.

En la temporada 1999/2000, cuando el Dépor celebró su liga, el de Meñaka también tiene un éxito a sus espaldas: un subcampeonato de Segunda División con el consiguiente ascenso a Primera con su Club Atlético Osasuna, en el que permaneció tres temporadas justo antes de aterrizar en Vigo.

Lotina guarda un gran recuerdo de A Coruña, y recuerda con Quincemil cómo vivió él, desde la perspectiva de aficionado al fútbol, esa liga eterna para el campeón de los humildes. "Recuerdo muy buenas temporadas del Super Dépor, primero con Arsenio y luego con Irureta. Hay que poner en valor lo que hicieron, tuvieron temporadas muy buenas al nivel del Real Madrid o del FC Barcelona o del Valencia CF", dijo.

Para Lotina, la Liga del 2000 del Dépor solo tiene un calificativo: "merecido". "El Dépor tenía a jugadores como Mauro Silva, Fran o Bebeto. Eran grandes futbolistas y fue un título muy merecido porque habían hecho una gran liga".