Un Franco y una Carmen Polo ficticios marchan por la vuelta de la Casa Cornide al erario público
La entidad Defensa do Común ha celebrado este sábado la III Marcha Cívica para reclamar que la Casa Cornide se incorpore al patrimonio público. Con salida a las 12:30 horas de la Plaza de María Pita, la manifestación llegó hasta el inmueble propiedad de los Franco portando un cartel con el lema 'Que devuelvan todo lo robado, después del Pazo de Meirás, recuperación para el pueblo de la Casa Cornide'.
Formaciones políticas como el BNG o Marea Atlántica acompañaron a Defensa do Común en la reivindicación de recuperar este inmueble, que hace unos meses salió a la venta. Así, la portavoz de Marea, María García volvió a reclamar al Concello da Coruña "que presente dunha vez a demanda xudicial necesaria para desfacer a fraude de Lei na que a Casa Cornide rematou en mans da familia do ditador Franco, tal e como lle reclamamos no Pleno en numerosas ocasións. A Casa Corinde é patrimonio de toda a veciñanza da Coruña, e debe volver ser patrimonio público, tal e como ocorreu co Pazo de Meirás en Sada. Por dignidade e memoria histórica".
Por su parte, el portavoz del BNG, Francisco Jorquera, aseguró que "nin o Goberno Local nin a Xunta de Galiza están a cumprir cos seus deberes. Instámolos, por tanto, a que actúen xa en defensa do interese público, visando a restitución ao patrimonio municipal dun palacete que, non o esquezamos, chegou a albergar a sede do Concello”.
Además de este carácter reivindicativo, la marcha también tuvo un ambiente lúdico, y ha sido encabezada por los actores Fernando Morán e Isabel Risco, caracterizados como el dictador Francisco Franco y su esposa, Carmen Polo. Esta es la tercera ocasión en la que se organiza una marcha de este tipo.
Así pasó la Casa Cornide a manos de los Franco
La Casa Cornide, recoge Europa Press, fue comprada en 1948 por la Dirección General de Bellas Artes (Ministerio de Educación). Con Alfonso Molina como alcalde pasa a propiedad municipal, mediante un expediente incoado en 1958 y formalizado en junio de 1962 a través de una permuta con el Ministerio de Educación Nacional, que recibe a cambio una parcela municipal en San Roque.
Pocos días después de dicha permuta, Sergio Peñamaría (sucede a Alfonso Molina como alcalde el 19 de mayo de 1959), tramita la venta y el pleno de 3 de julio de 1962 acuerda la venta del palacio y también las bases para una subasta que se celebra un mes después. Barrié gana, recuerda Defensa do Común, "la subasta-farsa" celebrada el 2 de agosto de 1962 y adquiere la Casa Cornide por 305.000 pesetas.
Esa misma tarde el pleno da cuenta que Barrié solicita transmitir la propiedad a Carmen Polo. Tres días después, recuerdan, vendió la casa a Carmen Polo por 25.000 pesetas, como figura en la escritura.
