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Photouid: El fotógrafo venezolano que enseña una Coruña diferente con un juego de pistas visual

Ha comenzado en redes sociales un original juego con sus seguidores (casi 2.000), que consiste en que mediante pistas que dan sus propias fotos encontrar el lugar donde están inmortalizadas y llevarse la imagen de regalo
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Imágenes en blanco y negro que enseñan otra perspectiva de A Coruña. Esta es la principal labor personal del venezolano Riger Lucero, de 35 años, de profesión protésico dental y con la fotografía como principal pasión y hobby. Tanto es así que bajo el pseudónimo Photouid, ha comenzado en redes sociales un original juego con sus seguidores (casi 2.000), que consiste en que mediante pistas que dan sus propias fotos encontrar el lugar donde están inmortalizadas y llevarse la imagen de regalo.

Las fotografías las realiza con su móvil, que le acompaña a todas partes, y aprovecha los viajes en bicicleta que realiza al salir del trabajo para pasar por zonas determinadas de la ciudad que quiere poner bajo su objetivo. Llegó a Galicia hace cinco años con su pareja tras vivir un año en Argentina y decidieron quedarse en la ciudad herculina porque era similar a una región de Venezuela que conocían y que les recordaba a su hogar. "En mi profesión suelo tomar fotos a los trabajos que hago, pero salir a la calle a sacarlas nunca lo había hecho", reconoce sobre esta afición que desarrolla desde hace año y medio y que surgió por su motivación de querer tener fotos de calidad decorando su casa.

Una de las farolas del entorno de la plaza de Portugal es una de las primeras imágenes que han sido protagonistas de su original juego con su seguidores. "Era un diseño muy circular y me llamó la atención porque me gustan mucho las figuras geométricas y pensé que con una buena edición en blanco y negro, podía quedar bien", aclara. La playa de San Amaro ha sido otro de sus modelos, sobre la que explica que "tiene una estructura muy rara". "Quería encontrar rincones raros en la ciudad que ya se han hecho cotidianos y llamar la atención sobre ellos. Algunas estructuras de edificios modernistas o inmuebles incluso más antiguos con toques de brutalismo o muy geométricos, como el edificio de la Cruz Roja en Monte Alto que si te fijas puedes ver triángulos, cuadrados y círculos", cuenta.

Los populares Xerións han sido su inspiración, una iniciativa a raíz de la cual decidió ir dejando fotografías por la ciudad y comenzar su propio juego. La vista de la cúpula de María Pita desde el cuartel de Atocha sobre los árboles o la balaustrada del Paseo Marítimo son varias de sus imágenes más icónicas, además de otras de edificios o figuras de la ciudad inmortalizadas desde otro punto de vista, un resultado que en varias ocasiones ha tenido que conseguir acudiendo varias veces a la misma ubicación para encontrar el "ángulo adecuado".

Exposiciones y ampliar fronteras

Hasta ahora ha regalado 20 fotografías que ha ido dejando en diferentes rincones, cuatro imágenes de cada uno de los lugares, en diferentes semanas. Antes de hacer las publicaciones sobre dónde encontrar sus fotografías lanza mensajes preguntando quien está en una determinada zona para dar pistas, a la vez que las esconde un poco para dar ventaja a la hora de hacerse con una a sus más de 1.500 seguidores. "Cuando pongo las pistas quien me sigue me escribe mensajes directos de que están yendo hacia ahí rápidamente, es emocionante", reconoce.

Una de sus próximas metas es hacer lo mismo que ha llevado a cabo en la ciudad pero en otros lugares con fotografías de sus rincones más especiales. "La idea es crear y pasar de un fotógrafo de A Coruña a un fotógrafo del mundo", apunta. Gracias a su proyecto las paredes de su casa ya respiran A Coruña con imágenes propias de la Torre de Hércules, del Muncyt, de unos curiosos conductos de ventilación en la Avenida Finisterre, un túnel de entrada a la ciudad, las escaleras exteriores de la fábrica de Estrella Galicia o la caracola de Moncho Amigo en las inmediaciones de la Torre.

Estas y otras fotografías podrán verse en la cervecería Malte a partir del 13 de junio. Asimismo, Lucero también controla otras disciplinas como la escultura, algo que le "salvó" durante la pandemia ya que no paró de crear pirámides o calaveras entre otros elementos.

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