El Concello de Culleredo ha anunciado que convocará una reunión con los responsables de las atracciones y barracas a finales del verano, con el fin de reforzar la organización de futuras fiestas y evitar que enfrentamientos como el sucedido este año se vuelvan a producir.
La decisión llega tras una edición de las fiestas de O Burgo que concluyó este lunes sin incidentes reseñables, pese a la preocupación generada por una pelea multitudinaria registrada días antes del inicio oficial de los festejos.
El altercado, en el que participaron una treintena de personas, dejó tres detenidos y una persona herida por arma blanca, lo que llevó al Concello a intensificar el operativo de seguridad.
Además de reforzar la presencia policial, se decidió reubicar a las familias implicadas en la disputa para evitar nuevos enfrentamientos durante las celebraciones.
Pese a las alarmas iniciales, el balance de las fiestas ha sido positivo. El alcalde, José Ramón Rioboo, visitó este lunes por la mañana y al mediodía la zona para supervisar el desmontaje de las instalaciones, que se realizó con normalidad.
Rioboo agradeció expresamente la implicación de la Subdelegación del Gobierno, así como el trabajo coordinado de los efectivos de Policía Local, Guardia Civil, Protección Civil, personal sanitario del 061 y el Punto Violeta.
"Noso agradecemento por estar sempre atentos á protección da cidadanía", declaró el regidor durante su visita.
También destacó el funcionamiento del dispositivo de limpieza y mantenimiento activado durante las fiestas desde el área de Medio Ambiente. Las tareas de limpieza del recinto comenzaron ya este lunes por la mañana, y se completarán en cuanto finalice el desmontaje de las atracciones.
Con seis días de duración, las fiestas de O Burgo reunieron a miles de personas y concluyeron con la actuación de París de Noia y los tradicionales fuegos artificiales. Rioboo agradeció el esfuerzo de la Comisión de Fiestas y puso en valor el ambiente festivo recuperado en la parroquia.
Asimismo, Culleredo encara ahora la segunda parte del verano con un calendario repleto de eventos en otras zonas del municipio. La reunión prevista con los feriantes se celebrará en septiembre, con el objetivo de establecer normas claras que garanticen la buena marcha de los próximos festejos.