La recuperación del tráfico rodado en San Andrés desde finales de febrero tras un año de reforma integral dejó pendiente de resolver la movilidad en la calle Modesta Goicouría. Durante las obras se prohibió estacionar vehículos en batería en este enlace entre el Paseo Marítimo de A Coruña y la plaza de Pontevedra y se permitió el doble sentido para que los buses urbanos pudiesen circular desde y hacia el litoral de la ciudad. Ahora el Concello ha resuelto qué uso darle a la calle tras la remodelación de San Andrés.
Modesta Goicouría mantendrá el doble sentido de circulación que ha tenido en los últimos meses, una decisión que responde a la necesidad de mejorar el tráfico en el entorno de la plaza de Pontevedra y en la calle Juana de Vega. Se hará conectando la avenida Linares Rivas con el Paseo a través Picavia, el túnel de la plaza de Lugo y Paio Gómez.
En el islote central de la plaza de Pontevedra, donde en un lado está la conocida cafetería Manhattan, se realizará una readaptación para habilitar un carril por el cual los coches procedentes de Paio Gómez podrán girar para dirigirse al Paseo Marítimo a través de Modesta Goicouría.
Un autobús escolar circula por la calle Modesta Goicouría en dirección al Paseo Marítimo de A Coruña-
El Gobierno local, a través de una nota, ha informado de esta actuación urbanística que se desarrollará a lo largo del mes de junio. El Concello explica que la implantación de esta solución fue estudiada por el Centro Integral de Mobilidade (CiMob) "con el fin de atender a la necesidad de buscar alternativas para acceder a la avenida Pedro Barrié de la Maza sin saturar el túnel de Juana de Vega, que presenta intensos flujos de movilidad en horas punta, al ser la principal puerta de entrada desde Linares Rivas en dirección al Paseo".
Aunque el Gobierno local no lo explica en la nota, es probable que el estacionamiento quede definitivamente prohibido en Modesta Goicouría, donde antes de las obras se permitía en batería en una veintena de plazas de residente (zona verde) junto a la acera de un lateral del instituto Eusebio da Guarda. La zona de estacionamiento actual está cubierta por vallas tipo New Jersey.
"Dado que el tráfico de la ciudad siempre está controlado por semáforos, es factible modificar sus tiempos si, llegado el momento, precisamos ajustarlos en función de la demanda existente en las diversas franjas horarias del día", explica la edil de Infraestruturas e Mobilidade, Noemí Díaz.