Baldosa de materiales higroscópicos para absorber la humedad

Baldosa de materiales higroscópicos para absorber la humedad ETH Zúrich Omicrono

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Adiós a la humedad en casa: la ingeniosa baldosa que mejora el ambiente en las ambitaciones sin tener que gastar electricidad

Científicos europeos diseñan una baldosa con materiales reciclados que regula la humedad de la casa sin gastar electricidad.

Más información: Adiós a la humedad: el genial invento de Leroy Merlin que la elimina sin obras, ni instalación y va agotarse en España

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La humedad en el interior de casa es uno de los problemas más comunes durante el invierno en muchos hogares de España. Este factor incrementa la sensación de frío en invierno y calor en verano y es especialmente incómodo para muchas personas. Suele ser más frecuente en zonas cercanas a la costa, pero sobre todo en viviendas que no cuentan con un aislamiento adecuado. En cualquier caso, la realidad es que la humedad puede generar numerosos inconvenientes y eliminarla contribuirá a crear un ambiente más saludable en tu hogar.

De eliminar esa humedad acumulada en el interior de las viviendas se suelen ocupar los sistemas de ventilación que se combinan con los de climatización. Recogen la humedad y la expulsan fuera de la casa como los deshumidificadores que se pueden encontrar en cadenas de supermercado y electrónica como Leroy Merlín o Lidl.

Estos electrodomésticos han ganado en popularidad y cada vez se ven más integrados con aires acondicionados u otros equipos. Sin embargo, investigadores de la universidad de ETH Zúrich proponen una solución diferente: almacenarla en las paredes de forma temporal para después liberarla.

Almacenando la humedad

En lugar de liberarse al medio ambiente a través de un sistema de ventilación mecánica, la humedad se almacena temporalmente en los materiales de construcción sostenibles y luego se libera cuando se ventila la habitación y al ambiente se vuelve más seco. Esta solución, afirman, es óptima para espacios con mucho tráfico donde los sistemas de ventilación no son suficientes para mantener un entorno confortable.

El equipo científico ha expuesto sus resultados en una artículo en la revista científica con revisión por pares, Nature. En su exposición aluden a los problemas de salud que puede provocar un exceso de humedad como la proliferación de bacterias o virus, además de la incomodidad que un ambiente de este tipo puede provocar.

Detalle de la baldosa

Detalle de la baldosa ETH Zúrich Omicrono

Como el pladur, que se ha convertido en la principal herramienta para aislar del ruido muchas casas, este material se postula como solución a las zonas de mucha humedad. En sus pruebas han elegido climas como el de Portugal donde la humedad media puede estar en torno al 78-80% en invierno, en comparación con ciudades dentro de la península como Madrid donde el porcentaje medio suele ser más bajo en los meses fríos.

Estas nuevas paredes estarían fabricadas con materiales higroscópicos, una cualidad muy perseguida en el ámbito de la investigación científica por la capacidad que ofrece para recolectar el agua del aire y utilizarla en otros usos como la producción de energía mediante hidrógeno verde.

Una de las ventajas de este sistema radica en el ahorro de energía, pues los propios materiales harían el trabajo de un deshumidificador eléctrico. Estos componentes pueden absorber la humedad del ambiente en interior cuando la humedad aumenta y liberarla cuando el aire se vuelve más seco, evitando los dos extremos peligrosos para la salud. Otra de las ventajas está en el uso de materiales reciclados o fáciles de conseguir y un proceso de fabricación sencillo.

Polvo de mármol

Partiendo de residuos finamente molidos de canteras de mármol, se forma el material absorbente con aglutinante, en concreto, un geopolímero. Este componente se puede comparar con el cemento, siendo menos contaminante durante su fabricación. El geopolímero se obtiene mezclando metacaolín, que se utiliza en la producción de porcelana, y una solución alcalina.

Para probar esta nueva técnica de construcción, los investigadores lograron producir, mediante la técnica de impresión 3D, un prototipo de un elemento de pared y techo de 20 × 20 cm y 4 cm de espesor. El polvo de mármol se aplica en capas y se pega mediante el aglutinante geopolímero, quedando una superficie similar a las paredes rocosas con piedras intercaladas con cemento de forma desigual y espacios de aire. 

Además de esta pequeña muestra, los investigadores realizaron una simulación. En ella se escogió el ejemplo de una sala de lectura utilizada por 15 personas en una biblioteca pública de Oporto en Portugal. Con una humedad relativa del 40-60%, la estancia y la actividad de lectura se empiezan a complicar, sacando a los lectores de la zona de confort. Esa incomodidad es la que se ha calculado para determinar la viabilidad del invento. 

Proceso de impresión en 3D de la baldosa

Proceso de impresión en 3D de la baldosa ETH Zúrich Omicrono

Si la sala de lectura estuviera equipada con elementos que absorbieran la humedad, el índice de incomodidad podría reducirse en un 75% en comparación con una pared pintada convencional. Si se utilizaran elementos de 5 cm de grosor en lugar de solo 4 cm, el índice de incomodidad se reduciría hasta en un 85 %, afirman en su estudio.

Aunque por el momento se trate de un proyecto de investigación en fase inicial, la propuesta abre camino a la construcción de casas capaces de regular la humedad y temperatura interior de forma natural, permitiendo ahorrar en la factura de la luz en los meses de más frío.