El éxito de las caravanas y los kits para camperizar furgonetas en España sigue su tendencia al alza, pero no todo el mundo puede permitirse una inversión de ese calibre para viajar con la casa a cuestas. Las ventajas de este tipo de vehículos van desde la integración de elementos como la cocina o el baño, hasta la inclusión de toldos motorizados que se despliegan para tener zonas de sombra, pero también implica un gasto considerable.
Ahora, la empresa estadounidense Humbra ha presentado Firefly, un toldo ligero, versátil y fácil de montar y desmontar, que invita a adentrarse en territorio desconocido sin miedo a que no haya zonas con árboles para dar sombra. La ventaja de este invento es que se incorpora al propio vehículo pero también puede utilizarse en el suelo, lo que lo hace ideal para llevarlo a la playa o de camping.
Los dos elementos fundamentales de Firefly son un soporte pivotante, que se adapta a la bola de enganche de los coches, y un mástil telescópico, que permite un plegado y desplegado rápido (sólo 90 segundos, según su fabricante) para protegerse del sol y el calor o incluso de la lluvia.
Firefly desplegado desde un todoterreno junto a la carretera
Con unas medidas 155 x 41 x 25 cm cubre hasta 10,7 metros cuadrados, mucho más que otras soluciones similares, y mantiene su peso en unos discretos 22,6 kg, lo que no impide llevarla a cuestas para pasar un día en la playa, por ejemplo. Su diseño está pensado para transportar en la baca del coche, aunque también puede llevarse en el cajón de una pickup o sobre los asientos plegados de un todoterreno.
Firefly tiene además una pértiga ajustable en altura capaz de girar 360 grados, para poder modificar la zona sobre la que se proyecta la sombra según pasa el día sin cambiar la instalación. Los materiales son de primera calidad, como el toldo en tejido acrílico, los herrajes de acero inoxidable o las varillas de aluminio. Gracias a ellos y a los dos soportes de ventosa incluidos en el paquete, Firefly es capaz de soportar vientos de hasta 40 km/h.
Las primeras unidades de Firefly empezarán a entregarse en abril de 2024, gracias a una exitosa campaña de crowdfunding. De momento sigue activa en Kickstarter, donde se ofrece a partir de 1.100 euros, junto con complementos y accesorios como paredes laterales o paneles de extensión de tela.
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